La paella valenciana y la fabada asturiana son dos de los platos más típicos de la gastronomía de nuestro país y los más demandados por los turistas. A muchos españoles estas recetas les transportan inmediatamente a su infancia, cuando sus abuelos y abuelas las cocinaban con esmero en las reuniones familiares, además de recordarles a los sabores y la esencia de su tierra.

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Es por ello que cualquier comentario o acción negativa contra alguna de estas dos comidas puede despertar crispaciones y generar una rápida respuesta popular. Esto es precisamente lo que ha ocurrido con un polémico anuncio que el medicamento Almax ha lanzado en Asturias y en Valencia.

Todo empezó cuando este fármaco, utilizado para neutralizar el exceso de ácido gástrico, impulsó en Asturias una campaña en la que asociaba la acidez estomacal con el plato estrella de la región. En el cartel promocional podía verse una imagen de una fabada junto a unas cajas de este antiácido y el siguiente lema: "Almax, y disfruta de Asturias sin acidez". 

Las respuestas no tardaron en llegar. La patronal hostelera asturiana, el Ayuntamiento de Villaviciosa y la Cofradía gastronómica de Amigos de les Fabes del Principado de Asturias, entre otros, se pronunciaron contra el anuncio por considerar que afectaba negativamente a un producto fundamental de la cocina asturiana y exigieron su retirada. 

De hecho, el propio presidente del Gobierno de Asturias, el socialista Adrián Barbón, se sumó también al rechazo público y escribió en su Twitter que Almax debería "pedir perdón al pueblo asturiano y retirar inmediatamente esta campaña que falta al respeto".

Tras esta polémica desatada en Asturias se inició otra similar en Valencia. Allí Almax lanzó una campaña parecida que relacionaba la acidez con la paella valenciana. "Almax, y disfruta de Valencia sin acidez", podía leerse como eslogan.

Las asociaciones hosteleras Conhostur y Hostelería Valencia protestaron alegando que este anuncio suponía "un perjuicio" para el turismo y para "toda la cadena de productores, agricultores y profesionales del sector". Asimismo, amenazaron con adoptar "todas las acciones necesarias" si no se procedía a su "inmediata retirada". 

"Esta desafortunada campaña transmite una imagen que señala a la paella como nociva, cuando precisamente por su equilibrio de productos y su buen gusto, es y ha sido el plato más importante durante muchas décadas atrás en la gastronomía valenciana y de nuestro país", han expresado en un comunicado conjunto. 

Finalmente, ambos anuncios fueron retirados después de pasar varias semanas expuestos en múltiples farmacias de Asturias y Valencia. Por su parte, el laboratorio Almirall, responsable de la fabricación de Almax, ha pedido perdón y ha asegurado que su intención nunca fue ofender a nadie ni crear malestar. Además, han aclarado que la campaña tenía el visto bueno de la Asociación de Autocuidado en la Salud.