Que cada vez se consumen más productos procesados es algo que sabemos todos pero, además de eso, se estima que aproximadamente un 10% de los alimentos que se consumen en el primer mundo están adulterados con el fin de que quien los produce obtenga mejores beneficios. Tal es la situación que hasta existe una base de datos de alimentos fraudulentos en la que se registran alimentos falsificados. A continuación os contamos cuáles son los más populares entre estos alimentos con los que es fácil que te den gato por liebre.
Comida falsificada, 9 alimentos con los que es fácil que te timen
Queso
El queso se suele falsificar de dos formas, bien añadiendo otros ingredientes que no son queso o bien ofertando quesos baratos de baja calidad como si fueran quesos más caros. Por ejemplo, en Rusia, el 78% del queso que se vendió en 2015 fue reportado como fraudulento. En países como Francia o Suíza, lo más frecuente a la hora de elaborar el queso falso es sustituir parte de la leche por aceite de palma. Peor incluso, el caso destapado en Pennsylvania en 2012 cuando se descubrió que una fábrica utilizaba celulosa (pulpa de madera) para hacer más rentable su queso Parmesano.
Miel
La falsificación suele producirse cuando una empresa importa miel de China de muy baja calidad, en ocasiones a través de importaciones ilegales, y la comercializa como si fuese un producto premium. En ocasiones esta miel está adulterada con otro tipo de endulzantes como el sirope de maíz o de arroz. Una prueba que se puede hacer en casa para comprobar si una miel es auténtica miel consiste en untar una rebanada de pan con una capa fina de la miel en cuestión y esperar un par de minutos, si la superficie se vuelve ligeramente crujiente, la miel es de buena calidad, en cambio si el pan se empapa, la miel no es lo que dice ser.
Jamón ibérico
Personalmente me parece uno de los engaños más surrealistas, pero se ha dado el caso de jamones de pata negra en los que la color negro característico de la pezuña de los jamones ibéricos se debía nada más y nada menos que a… una capa de pintura.
Aceite de oliva virgen extra
Los fraudes se cometen principalmente con los aceites italianos que, o bien no proceden de Italia aunque así se indique en el etiquetado, o bien se mezclan con aceites vegetales más baratos como el de soja o el de cacahuete para obtener más beneficios.
Chocolate
Los aztecas usaban los granos de cacao como moneda y ya en aquellos tiempos había falsificaciones. Pero a día de hoy, en la industria del chocolate es habitual encontrar en las tabletas de chocolate ingredientes como grasas vegetales que no son manteca de cacao o que en su fabricación se usen granos de cacao de peor calidad de la que se anuncia en el etiquetado.
Pescado y marisco
Filetes de pescado que se venden diciendo ser de una especie cuando en realidad son de otra de peor calidad, pescado de piscifactoría que se vende como salvaje, aunque es un fraude más común en USA, me viene a la mente uno muy habitual en Galicia que es el de las zamburiñas, un molusco parecido a la vieira pero de menor tamaño y de carne muy apreciada pero que en la mayoría de los casos, lo que nos van a intentar colar son volandeiras, un molusco de aspecto similar pero calidad inferior.
Vodka
Se trata de falsificaciones realmente graves hechas en destilerías ilegales de Rusia y Europa del Este y etiquetadas como primeras marcas. Pueden llegar a usar productos tóxicos que han causado muertes en alguna ocasión. Afortunadamente en España es una práctica poco frecuente y cuando después de una noche de copas te levantas con resaca, la culpa será del exceso, no del garrafón.
Azafrán
Del fraude del azafrán español ya os hablamos no hace mucho, pero es que la cosa no acaba ahí, hasta cebollas teñidas se han llegado a encontrar en azafranes por el mundo adelante.
Vino
Como la mayoría de los mortales no tenemos el paladar educado para distinguir un vino muy bueno de otro que no lo es tanto para los falsificadores es un negocio goloso, aunque afortunadamente la industria vinícola cada vez invierte más en luchar contra las falsificaciones recurriendo a tecnologías sofisticadas como la identificación por radiofrecuencia o el análisis de ADN.
Fuente | Mental Floss