Los Reyes Magos podrán traer a los fanboys su regalo más deseado en los últimos meses: los famosos AirPods. Tras una larga espera, los flamantes auriculares inalámbricos de Apple ya se pueden reservar y sin duda harán las delicias de los clientes más fieles de la compañía durante las celebraciones navideñas.
Eso sí, sus usuarios deberán preocuparse por no perder esos pequeños auriculares sin cables: la broma de extraviar uno sale por 67 euros. De esta forma, comprar un solo AirPod cuesta un tercio del total del producto: la pareja sale por un nada módico precio de 179 euros.
Algunas empresas y particulares ya están intentado poner solución al futuro drama que supondrá perder estos deseados auriculares que los de Cupertino presentaron como una de sus grandes novedades en 2016. Sin ir más lejos, a una compañía de impresión en 3D se le ocurrió fabricar unos pendientes en forma de cesta que recogieran los AirPods en caso de caída. Ahora, a un usuario de Twitter se le ha ocurrido una singular forma de evitar que se caigan: clavarlos en sus propias orejas.
Llevar un producto Apple en el cuerpo
Andrew Cornett ha publicado un tuit en el que muestra su sorprendente idea para que la pérdida de los AirPods no sea un quebradero de cabeza: ha colocado los auriculares en sus dilataciones. Al atravesar el lóbulo de su oreja, el auricular queda perfectamente encajado para que pueda escuchar música con relativa comodidad.
La radical propuesta de este neoyorquino ya ha conseguido cientos de retuits y un buen puñado de comentarios en la red social del pájaro azul. "La necesidad es la madre del ingenio", le ha contestado un usuario, acompañando el comentario con varios emojis que aplauden su ocurrencia.
¿Copiarán la idea otros fanboys dispuestos a agujerearse la oreja? ¿Qué pensará Tim Cook de que algunos propongan lucir su nuevo accesorio como si se tratase de unos pendientes? De un modo u otro, lo cierto es que muchos ya están tirando de ingenio para idear divertidas soluciones que remedien los problemas que pueden acarrear los flamantes AirPods si se caen de la oreja.
Un diseñador anunciaba con un "cariño, he arreglado los AirPods" su propuesta: una arandela con la forma de la oreja para rodearla. Tal vez no sea el remedio más estético, pero nadie puede negar que es efectivo.
Tampoco se puede negar que la magia de los AirPods se pierde un poco si añadimos ese complemento o si los unimos a unos cables para evitar que se pierdan. Todo ello sin contar con que también sería preocupante extraviar la funda de carga: sin ella, los auriculares no sirven para nada.
En caso de que no te importe renunciar al sello inconfundible de Apple, siempre te queda la opción de elegir algún modelo de auriculares Bluetooth bastante más económicos que los de la manzana mordida.
Ahora bien, si como fiel fanboy ya habías pedido a los Reyes Magos unos AirPods, siempre puedes agujerearte la oreja para, además de lucir los auriculares de moda, presumir de que llevas un producto de la firma de la manzana mordida literalmente incrustado en tu cuerpo.