Así es la pluripatología grave común en España que ha causado la muerte de Julián Muñoz

Julián Muñoz, exalcalde de Marbella, ha fallecido a los 76 años a causa del cáncer de pulmón por el que recibía tratamiento en el hospital HC de Marbella. Aunque el tumor haya sido la causa final del triste desenlace, el exregidor padecía una "pluripatología grave e incurable" tal y como recogió la resolución que le otorgó la libertad condicional que le ha permitido pasar sus últimos días junto a su familia y fuera de prisión pese a su condena por la 'Operación Malaya'.

Este término hace referencia a la concurrencia de más de una enfermedad crónica en un paciente, una realidad cada vez más común en España. Los expertos en el cuidado del Paciente Crónico Complejo de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) estiman que el 60% de los pacientes que requieren ingreso hospitalario por su especialidad presentan al una de estas patologías complejas. El 40%, sin embargo, sufre comorbilidades, es decir, dos o más de ellas a la vez.

A mayor edad del paciente, además, mayor riesgo acumulado. La prevalencia de los pacientes pluripatológicos en España es del 1,8%, pero es a partir de los 60-65 años cuando la proporción aumenta. "Las enfermedades crónicas se van agregando en una misma persona a medida que avanza la edad, de forma que, en los mayores de 80 años, su promedio es superior a cuatro", explicaba María Dolores Martín Escalante, portavoz de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) y jefa de sección de medicina interna en el Hospital Costa del Sol de Marbella.

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Las patologías más prevalentes de los pacientes crónicos complejos con pluripatología son las enfermedades cardíacas (68%), la enfermedad renal crónica (49%), las enfermedades neurológicas (43%) y las respiratorias (32%) según la SEMI. Precisamente Julián Muñoz -cuyo estado de salud ha sido público en los últimos años al haberlo divulgado él mismo en programas del Corazón y como justificación de las medidas de gracia penitenciarias- ha sufrido graves problemas de salud que afectan a los cuatro sistemas descritos, empeorando cumulativamente su pronóstico.

El primer diagnóstico del que se tuvo conocimiento fue el de 'pluripatología crónica de carácter cardiovascular, metabólico y respiratorio'. En primer lugar, esto hace referencia a la afectación que sufría en dos de las cuatro válvulas del corazón, la aórtica y la mitral. Este problema arterial terminó provocándole un accidente cerebrovascular o ictus y "dos o tres infartos" que le obligaban a "tomar 20 pastillas al día" según explicaba con su particular estilo. Es importante subrayar que cada una de estas incidencias aumenta el riesgo de recurrencia fatal hasta un 50%.

En paralelo, Muñoz requirió ingreso hospitalario por una colecistitis aguda, una inflamación del sistema digestivo que afecta a la vesícula biliar. El propio exalcalde de Marbella explicaba que le habían tenido que quitar "barro y piedras", apuntando a los cálculos biliares, una acumulación de fragmentos endurecidos de bilis, colesterol y bilirrubina que pueden encajarse y taponar los conductos, causando una infección. Como ocurre con los cálculos renales, las 'piedras del riñón', puede ser necesaria la cirugía para eliminarlos. En su caso, tuvo que ser operado dos veces.

Muñoz también sufrió cegura parcial -una pérdida del 50% en la visión- a causa de la degeneración macular que padecía, y por la que le tenían que "inyectar todos los meses" en el hospital. Se trata de un trastorno ocular muy frecuente que afecta al 10% de las personas mayores de 60 años y representa la primera causa de discapacidad visual, siendo responsable del 50% de los casos de ceguera legal. A partir de los 75, afecta a una de cada cuatro personas, y aumenta su incidencia por los hábitos insanos como el tabaquismo, pero también por los problemas arteriales.

El cáncer "galopante" de pulmón ha sido el último de los factores concurrentes, y el responsable de los problemas de insuficiencia respiratoria que ha arrastrado Muñoz en los últimos años. Según concluía la SEMI, dado que las pluripatologías graves son incurables, el foco debe ponerse en la calidad de vida del paciente y el acompañamiento familiar, evitando en lo posible los ingresos hospitalarios prolongados. El propio Muñoz había comunicado que su deseo era morir rodeado de su familia.