La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) ha emitido una alerta este martes relativa a casi 200 lotes de unas lentillas diarias y mensuales fabricadas por Alcon, cuya comercialización ya se ha interrumpido al considerarse que podrían ocasionar irritación o visión borrosa, entre otros efectos adversos.
La agencia dependiente del Ministerio de Sanidad ha tenido conocimiento por el propio fabricante, la empresa Alcon Healthcare -filial española de la estadounidense Alcon Laboratories- del cese de venta de algunos lotes de las lentes de contacto "Dailies total1" y "Total30" por no cumplir con los estándares de calidad y/o rendimiento a lo largo de su vida útil indicada en el etiquetado.
El uso de lentes de los lotes identificados podría ocasionar problemas temporales como irritación, enrojecimiento o visión borrosa, que suelen desaparecer tras la retirada o sustitución de las mismas.
Alcon está enviando una nota de aviso dirigida a ópticas y usuarios de este problema. Por su parte, Aemps advierte a los consumidores y les pide que dejen de utilizar las lentillas de los lotes afectados. Los clientes deben ponerse en contacto con la óptica en la que se adquirieron para devolverlas por otras.
"Alcon ha iniciado una acción correctiva voluntaria en de seguridad en campo de productos sanitarios para lotes específicos de lentes de contacto DAILIES TOTAL1® y TOTAL30®", afirma la empresa en la nota enviada a los consumidores. "Hemos detectado una incidencia de calidad aislada en un material suministrado por un proveedor externo que se utilizó en la producción estos lotes específicos de lentes de contacto en una única planta de fabricación".
"En consecuencia, los lotes de lentes de contacto identificados podrían no cumplir con los estándares Alcon de calidad y/o rendimiento durante toda la vida útil indicada en el etiquetado. No es de esperar que las lentes de contacto de los lotes identificados supongan un mayor riesgo para el usuario", prosiguen.
"Como ocurre con cualquier lente de contacto, existe una remota posibilidad de que el uso de una lente de los lotes identificados provoque problemas temporales como los que se indican en las instrucciones de uso del paciente (irritación, enrojecimiento o visión borrosa), que suelen desaparecer tras la retirada o sustitución de la lente", aclaran en el comunicado.
La empresa pide a los consumidores que hayan recibido las lentillas pertenecientes a los lotes afectados "que dejen de utilizar el producto" y "se pongan en contacto con su profesional de la visión o con el establecimiento" donde fueron adquiridas las lentes de contacto, "para obtener más información sobre los pasos a seguir".
También requiere a las ópticas que revisen su inventario y, en el caso de disponer de los productos identificados, cesar su venta y desechar las lentes. En el caso de que las hubiera vendido, las ópticas deberán contactar con los consumidores para informarles del problema, pedirles que las tiren y proporcionarles otras de lotes distintos.