El ibuprofeno y el paracetamol son dos de los fármacos más vendidos en España pero, si se confirman las conclusiones de un estudio publicado en Policy Insights from the Behavioural and Brain Sciences, su consumo podría dispararse mucho más, sobre todo entre las mujeres.
En un hallazgo que los propios autores definen como alarmante, lo que se ha visto es la evidencia preliminar que ambos medicamentos no sólo atenuan las sensaciones físicas de dolor, sino que también influyen en la sensibilidad a experiencias sociales que se interpretan como dolorosas. El trabajo sugiere, así, que el dolor físico y social comparten más que el nombre.
Lo curioso es que este efecto sólo se vio en mujere. De hecho, para los hombres es peor medicarse, ya que esto aumenta sus emociones antes acontecimientos adversos.
Los investigadores de la Universidad de California en Santa Bárbara (UCSB) analizaron pequeños estudios ya publicados sobre este asunto, para llegar a la misma conclusión y de forma generalizada: los fármacos sin receta más comunes alivian el cuerpo y el alma aunque, según dicen, hace falta más investigación para saber qué hay detrás de esta observación.
Pero, si se confirman los hallazgos, estos no serían para tirar cohetes, advierten los autores. "Los consumidores asumen que cuando se toman un fármaco sin receta, éste les mejorará sus síntomas físicos, pero no anticipan que tendrán efectos psicológicos más amplios. ¿Se necesita una mayor regulación? ¿Se debe incluir una advertencia en el prospecto?", se preguntan los autores, que se responden a continuación: "En este momento sería prematuro sacar conclusiones pero, en cualquier caso, los políticos deberian empezar a pensar en los potenciales riesgos y beneficios para la salud pública".