Mantener una dieta equilibrada es esencial para disfrutar de una vida saludable. En esta dieta, es importante incluir los llamados "superalimentos". Estos alimentos se distinguen por ser muy completos, ricos en nutrientes y compuestos bioactivos.
Gracias a su densidad nutricional y a la presencia de estos compuestos, los superalimentos aportan múltiples beneficios para la salud, destacando por su contribución al bienestar general y a la prevención de diversas enfermedades. Su incorporación en la alimentación diaria es un paso clave hacia un estilo de vida más saludable.
Aunque algunas frutas son ampliamente conocidas por sus beneficios para la salud, hoy destacamos una en particular: la chirimoya. Esta fruta, dulce y nutritiva, es reconocida por sus propiedades beneficiosas en la lucha contra la anemia y el estreñimiento, además de ayudar en el control de la presión arterial.
Este exótico superalimento es un fruto redondo que mide alrededor de 10 a 20 cm de diámetro y puede pesar desde unos pocos cientos de gramos hasta más de un kilo. Es un alimento saludable que destaca tanto por su textura como por su color, albergando en su interior una pulpa blanca de sabor dulce muy nutritiva.
¿Cuál es la fruta con más azúcar?
La percepción de que los dátiles y los higos contienen mucho azúcar no es errónea, especialmente cuando se consumen en su forma deshidratada. El proceso de deshidratación elimina el agua de las frutas, concentrando así sus azúcares naturales. Por lo tanto, en su forma desecada, tanto los dátiles como los higos son muy ricos en azúcares.
Sin embargo, si hablamos de frutas frescas, la chirimoya destaca por su alto contenido de azúcar. Según la Fundación Española de la Nutrición (FEN), la chirimoya puede contener hasta 20 gramos de hidratos de carbono por cada 100 gramos, y gran parte de estos hidratos de carbono son azúcares naturales.
Es importante tener en cuenta que, aunque la chirimoya tiene un alto contenido de azúcar, también ofrece otros nutrientes valiosos, como vitaminas, minerales y fibra. Esto la hace diferente de los azúcares añadidos que se encuentran en muchos alimentos procesados como el chocolate, que aportan calorías vacías sin beneficios nutricionales adicionales.
Aunque las frutas con alto contenido de azúcar deben consumirse con cierta moderación, especialmente por personas con diabetes o que están vigilando su ingesta de azúcar, pueden formar parte de una dieta equilibrada y saludable. La clave está en el equilibrio y en el consumo consciente, considerando la fruta como una fuente de nutrientes y no solo como un sustituto de los dulces procesados.
Los beneficios de la chirimoya para la salud
Consumir esta fruta aporta grandes beneficios para la salud, entre los cuales se encuentra su capacidad para frenar el envejecimiento de la piel. Al tratarse de un alimento rico en vitaminas A y C consigue enfrentarse al envejecimiento prematuro de la dermis.
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Aunque las naranjas son famosas por su contenido de vitamina C, la chirimoya también ofrece una cantidad sustancial de esta vitamina, junto con otros antioxidantes que ayudan a formar colágeno, lo que aporta firmeza y elasticidad al cutis.
Además, se trata de una fruta rica en vitamina B9 o ácido fólico, lo que ayuda a reducir el cansancio y la fatiga, con lo que logra estimular la producción de las células que transportan el oxígeno. De esta manera, se convierte en un alimento ideal para ser parte de la dieta de todas aquellas personas que padecen problemas de anemia.
Al tratarse de una gran fuente de fibra, ayuda a combatir el estreñimiento y regular el tránsito intestinal, además de a aliviar la sensación de pesadez en el estómago. A ello hay que sumar que, gracias a los extractos de semillas que contiene, es un producto que tiene la capacidad de relajar los vasos sanguíneos, ayudando a aumentar el flujo sanguíneo y a controlar la presión arterial. Gracias a su contenido en potasio también favorece la excreción de sodio a través de la orina, lo que reduce la tensión arterial.
Este superalimento, por su riqueza en vitaminas A, C y antioxidantes, ayuda a la protección del sistema inmunológico, fortaleciendo las defensas naturales del cuerpo y enfrentándose a diversas afecciones, como el resfriado común.
Por todo lo anterior, se trata de un superalimento exótico muy recomendable para que forme parte de cualquier dieta equilibrada, siendo un producto que se consume cuando está maduro. La chirimoya se come rompiéndolo y comiendo la pulpa de color blanco que tiene en su interior, quitando las semillas. Esta pulpa es comestible, dulce y muy nutritiva y se utiliza para la elaboración de batidos, jarabes, postres, licores, helados o bebidas frías.
Otras frutas tropicales beneficiosas para la salud
Además de la chirimoya, existen otras frutas tropicales con sabores intensos y exóticos que, además de aportar un gran sabor a nuestro paladar, están cargadas de propiedades saludables. En toda dieta se deben que incluir piezas de fruta a diario y las frutas tropicales destacan por su riqueza en azúcares, antioxidantes y líquidos. Algunas de las mejores opciones son:
- Aguacate: este fruto, considerado un superalimento, ha crecido en popularidad a lo largo de los últimos años, sobre todo en la industria cosmética. Es un producto imprescindible en cualquier dieta equilibrada, ya que aporta numerosos nutrientes y energía a nuestro organismo. Contiene vitaminas A, B1, B2, B3 y E, así como potasio, magnesio y otros antioxidantes.
- Plátano: presente en todo el mundo, el plátano es una de las frutas tropicales más consumidas y populares, un alimento muy nutritivo y energético que es una excelente opción para el desayuno o la merienda y que se puede consumir de maneras muy diversas. Es rico en vitaminas A, B y C, así como en minerales como el magnesio y el potasio, y es fácil de digerir. Además, ayuda a controlar el contenido de azúcar y cuida del sistema nervioso y muscular.
- Papaya: la papaya es una de las mejores frutas para contribuir al correcto funcionamiento del estómago y el intestino, pero además posee propiedades antiinflamatorias que ayudan a aliviar diferentes trastornos y problemas de salud, entre los cuales se encuentran la prevención y tratamiento de parásitos intestinales.
- Mango: jugoso y dulce, es una fruta que destaca especialmente por su contenido en betacarotenos, los cuales contribuyen a reducir los niveles de colesterol al mismo tiempo que ayudan a prevenir enfermedades cardíacas. También posee fibra soluble que favorece el movimiento intestinal y vitamina C, que hace que sea un potente antioxidante y antiinflamatorio.
- Maracuyá: la fruta de la pasión no debe faltar en batidos, postres y jugos, ya que se trata de una fruta antioxidante y depurativa que hace una gran contribución de cara a la eliminación de toxinas. Además, hay estudios que aseguran que es de gran utilidad para relajarse
- Guanábana: también llamada graviola, se ha convertido en una fruta cada vez más popular, en gran parte por sus propiedades anticancerígenas. Uno de los nutrientes más eficaces es la quercetina, un flavonoide.
- Coco: esta fruta destaca por sus valores nutricionales, consumiéndose tanto su pulpa, que es fuente de grasas y fibra, como su agua, rica en minerales y oligoelementos de alto poder reconstituyente. Es ideal para estimular el sistema inmunitario.