El arroz no es uno de esos alimentos que inmediatamente vinculamos con la dieta mediterránea, pero a pesar de ello sí que forma parte del que es uno de los platos más típicos de la gastronomía española: la paella. Por este motivo, aunque en la alimentación mediterránea nos enfocamos en alimentos locales y frescos, principalmente basados en frutas, verduras, nueces, semillas, legumbres y cereales integrales, posee una gran relevancia en nuestra cocina.
En algunas regiones mediterráneas, el arroz se ha convertido en un ingrediente fundamental de platos típicos como la paella española o el risotto italiano. En ellos, el arroz es un ingrediente que acompaña a otros alimentos como mariscos, verduras y especias. De esta forma, aunque en España el arroz no es un ingrediente central de la comida típica española, sí que es, junto a la pasta y otros alimentos ricos en hidratos, uno de los más usados como complemento a otras recetas.
El arroz proporciona muchos nutrientes e hidratos de carbono complejos, vitaminas B, hierro, fibra y zinc, pero también ayuda a poder absorber otros nutrientes importantes como el calcio, el potasio o la vitamina D.
¿Cuánto arroz se puede comer a la semana?
Al igual que sucede con el pan o la pasta, hay quienes se preguntan qué dice la ciencia sobre tomar arroz más de tres veces a la semana, para saber así cuál es la cantidad semanal recomendada de este alimento. Esto es necesario teniendo en cuenta que el arroz es un ingrediente que puede ser parte de una infinidad de platos diferentes.
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La cantidad de arroz que se puede comer a la semana dependerá de distintos factores como la edad, el sexo, la salud, el nivel de actividad física y las necesidades calóricas de cada individuo. Si te preguntas si puedes tomar arroz más de tres veces por semana, debes saber que es perfectamente posible, ya que diferentes estudios han podido demostrar que se pueden tomar entre 2 y 4 tazas a la semana, lo que correspondería a entre media y una taza de arroz cocido por comida. Sin embargo, si una persona tiene unas necesidades calóricas más elevadas por su trabajo o nivel de actividad física, puede llegar a superar estas cantidades.
Por otro lado, es necesario conocer que el arroz es una fuente relevante de hidratos de carbono y puede ser alto en calorías, por lo que es necesario equilibrar la cantidad de arroz según el resto de fuentes de calorías y nutrientes de la dieta.
¿Es malo comer demasiado arroz?
No hay problema alguno en comer arroz tres veces a la semana. De hecho, su consumo proporciona energía para nuestro organismo gracias a su aporte de hidratos de carbono y al hecho de que sea rico en vitaminas y minerales como el magnesio o el hierro.
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Sin embargo, si se consume en grandes cantidades o como una fuente principal de carbohidratos en la dieta, puede ayudar a que haya un exceso de calorías, lo que al mismo tiempo puede hacer que aumente el riesgo de padecer enfermedades crónicas como la diabetes, la obesidad y las enfermedades cardíacas.
Beneficios del arroz
El arroz integral tiene un menor índice glucémico que el blanco y mayor riqueza vitamínica, lo que contribuye a mantener la vitalidad y a equilibrar el ánimo. El arroz es una gran fuente de energía, vitaminas y minerales, así como de proteínas sin gluten, y gracias a su composición nutricional aporta los siguientes beneficios para la salud:
- Bueno para el corazón: el bajo contenido en sodio y la presencia de potasio hacen que el arroz sea un excelente protector del sistema cardiovascular, ya que promueve la estabilidad de la presión arterial, además de contribuir a la regulación de la frecuencia cardiaca. Además, gracias a la acción del magnesio se protege el recubrimiento de las arterias de la agresión que puedan sufrir por cambios súbitos de la presión sanguínea. Su generoso contenido en fibra ayuda a reducir el nivel de colesterol LDL, absorbiendo el exceso de lípidos y deshaciéndose de ellos por la vía intestinal.
- Bálsamo digestivo: uno de los grandes beneficiados de un buen plato de arroz integral es el intestino, ya que la fibra alimenticia que contiene cumple una función reguladora muy importante en el tránsito intestinal. Además, su salvado no resulta irritante para las mucosas del intestino, y ayuda a reparar la mucosa inflamada, recomendable para personas con síndrome de colon irritable.
- Efecto relajante: el hecho de que el arroz favorezca la liberación de energía de forma gradual se suma el efecto relajante del aminoácido triptófano que se puede encontrar en las proteínas, así como en las vitaminas del grupo B y la riqueza en magnesio, siendo imprescindibles para que el sistema nervioso funcione adecuadamente y se pueda producir energía.
- Previene el cáncer: consumir arroz de forma regular ejerce protección frente al cáncer, sobre todo el de colon, mama y de próstata, gracias a la acción de varios de sus componentes. Entre ellos se encuentran la fibra insoluble, que acelera el tránsito digestivo para reducir el efecto de sustancias cancerígenas sobre las mucosas del intestino, además de disfrutar de una protección potenciada por la acción del selenio, que protege el sistema inmunitario y evita que se formen radicales libres.
Por todo ello, el arroz debe ser incluido en una dieta equilibrada, además de que tiene la ventaja adicional de que se puede adaptar con facilidad a cualquier tipo de receta.