España es uno de los grandes consumidores de naranjas. De hecho, este no ha hecho más que crecer en los últimos años superando incluso los 13 kilogramos por persona en 2022. Y es que, esta sabrosa fruta originaria del sureste de China y norte de Birmania es uno de los alimentos más apreciados precisamente por su vitamina C, folatos, flavonoides y beneficios para la salud.
Otro de los puntos a favor de esta fruta, es que puede encontrarse en el supermercado durante todo el año y además, está asociada a la lucha contra los resfriados e infecciones más típicas en España gracias a las propiedades que incluye.
Una fruta capaz de aportar hasta 50 miligramos de vitamina C por cada 100 gramos y cuya composición cuenta con casi el 90% de agua. Sin embargo, más allá de todas sus propiedades y beneficios conocidos, es importante tener en cuenta que su consumo no beneficia por igual a todas las personas y esto incluye a las personas con colon irritable, úlceras, gastritis, migrañas o personas con problemas de desgaste en los dientes.
Excepciones muy relacionadas con la capacidad de esta fruta ácida para aumentar la acidez gástrica o de elevar la histamina tan relacionada con las migrañas y dolores de cabeza.
Aún así, fuera de estas excepciones mencionadas, las naranjas juegan un papel fundamental dentro de la dieta y los beneficios que pueden brindar son muy amplios.
Beneficios de las naranjas
Las naranjas son reconocidas por su alto contenido de vitamina C y flavonoides, ofrecen una protección vital a las células contra los daños provocados por los radicales libres. Estos compuestos nocivos no solo contribuyen al desarrollo de diversas enfermedades, sino que también aceleran los procesos de envejecimiento.
Aliadas para la salud cardiovascular
El consumo de naranjas tiene un impacto significativo también en la salud del corazón. Y es que, la vitamina C que contienen ayuda a prevenir la oxidación del colesterol LDL, comúnmente conocido como "colesterol malo". Este proceso evita que el colesterol se deposite en las paredes de los vasos sanguíneos, reduciendo así el riesgo de aterosclerosis.
Además, los flavonoides presentes en las naranjas fortalecen las paredes de los vasos capilares y aumentan la elasticidad de las arterias. Beneficios especialmente importantes para personas con predisposición a trombosis, edemas o varices, ya que también mejoran la circulación venosa y previenen la agregación plaquetaria, aportando un efecto antitrombótico.
Prevención del Estreñimiento
Las naranjas también destacan por ser una excelente fuente de fibra, lo que las convierte en un aliado eficaz contra el estreñimiento. La fibra no solo facilita el tránsito intestinal, sino que también contribuye a mantener la salud digestiva en general gracias a sus propiedades laxantes.
Combaten la Anemia
Para quienes padecen anemia ferropénica, la naranja es una fruta muy beneficiosa. Consumirla junto a alimentos ricos en hierro, como carnes y pescados o junto a suplementos de hierro, mejora la absorción de este mineral vital.
La vitamina C de las naranjas además convierte el hierro férrico en ferroso, una forma más asimilable por el organismo, acelerando así la recuperación de los niveles de hierro en sangre.
Aporte de Vitamina C
Una naranja mediana proporciona aproximadamente 85 mg de vitamina C, superando las necesidades diarias recomendadas de 60 mg. Sin embargo, existen circunstancias que aumentan la necesidad de vitamina C, como el embarazo, la lactancia, la práctica intensiva de deportes, el tabaquismo o el consumo de ciertos medicamentos. En estos casos, consumir una naranja diaria es aún más beneficioso para alcanzar los niveles adecuados de esta vitamina esencial.
Quiénes tienen que dejar de consumir naranjas
Aunque las naranjas presentan escasas contraindicaciones para la salud, existen determinadas situaciones en las que es recomendable moderar su consumo. Por ejemplo, su ingesta puede aumentar la acidez gástrica. Este aspecto resulta problemático para quienes sufren de acidez estomacal, gastritis, colon irritable o úlceras, ya que el consumo de naranjas podría agravar estos padecimientos.
También es importante destacar su efecto sobre las migrañas. Al igual que otros cítricos, las naranjas elevan los niveles de histamina en el organismo, lo que puede desencadenar migrañas o dolores de cabeza en personas susceptibles.
Además, la acidez natural de la naranja puede contribuir a la erosión del esmalte dental. Por esta razón, es aconsejable consumirlas con moderación para proteger la salud dental.
Por todo esto, aunque las naranjas son beneficiosas para la mayoría de las personas, quienes padezcan problemas gástricos, migrañas o preocupaciones dentales deben limitar su consumo para evitar los posibles inconvenientes.