Seguro que te encantan los frutos secos, pero piensas que si los tomas a menudo vas a engordar. Estos alimentos se han convertido en nuestros favoritos para picar entre horas o para acompañar una caña con amigos, pero deberían ser más protagonistas en nuestra alimentación del día a día. Los frutos secos son pura grasa saludable, pero no se asocian al aumento de peso, sino todo lo contrario. Es cierto que tienen muchas calorías, pero van acompañadas de fibra, proteínas y una buena selección de vitaminas y de minerales.
Si bien existe una variedad enorme de frutos secos, a los españoles hay pocos que se nos resistan. De todas formas, algunos de ellos nos siguen resultando algo exóticos y uno de esos son las nueces de macadamia. Es posible que estés familiarizado con estos frutos secos por el famoso helado de vainilla que ha hecho populares a estas nueces o que las compres todas las semanas en el supermercado. Se trata del fruto seco con más cantidad de grasas y también el que más calorías aporta, pero esto no debe importarte.
Si has parado a observar la tabla de valores nutricionales de una de estas bolsas de nueces de macadamia es posible que te haya sorprendido encontrar que 100 gramos equivalen a 758 kilocalorías. Es decir, más calorías incluso que las que aporta una hamburguesa sencilla. Ahora bien, estas nueces son mucho más saludables y, además, la ración ideal de estas nueces ronda, en realidad, los 30 gramos, lo que equivale a unas diez. La razón por la que son tan calóricas es que son muy ricas en grasas: ocupan un 77% de su composición.
Grasas buenas
Ahora bien, hay que destacar que la inmensa mayoría de esas grasas son ácidos grasos monoinsaturados, como los que son abundantes en los aguacates y en el aceite de oliva virgen extra. Tal y como explica la Fundación Española del Corazón (FEC), los ácidos grasos monoinsaturados "pueden disminuir los niveles de colesterol total y de LDL [el colesterol malo] cuando reemplazan parcialmente a los ácidos grasos saturados". El portal de salud Healthline subraya que estas grasas se han asociado a una menor incidencia de ictus y de ataques cardíacos mortales.
"Varios estudios sugieren que comer entre ocho y 42 gramos de estas nueces al día puede reducir los niveles de colesterol total y LDL incluso más de un 10%", explica Healthline. Además, este portal también destaca el poder del perfil de grasas de estos frutos secos para reducir la inflamación, que también aumenta el riesgo de padecer enfermedades del corazón. Las nueces de macadamia también parecen brindar una protección contra el síndrome metabólico, que suele ser la antesala a padecer una diabetes tipo 2.
[Este es el frutos seco que más te ayuda a reducir el colesterol (y además no engorda)]
De todas formas, este síndrome también puede predisponernos a otras enfermedades cardíacas y se caracteriza por la acumulación de grasa en la cintura, la presión arterial alta, los niveles de glucosa y triglicéridos altos y unos niveles bajos de colesterol bueno, también conocido como HDL. Los frutos secos con las características de las nueces de macadamia, en este sentido, han demostrado reducir los niveles de glucosa en sangre y, además, ayudan a perder peso. Pero, ¿cómo un alimento tan grasiento puede llegar a adelgazar?
Mejora de la salud
Este efecto se ha asociado a la presencia de proteínas y de fibra en la composición de estos frutos secos: se trata de dos componentes muy efectivos para reducir la sensación de hambre y, de esta manera, estas nueces evitan que comamos más kilocalorías de las que necesitamos. La fibra que contienen las nueces de macadamia es, además, efectiva para mejorar la salud de nuestra microbiota intestinal: este fruto seco contiene un 6,3% de este componente, por lo que se trata de una cantidad bastante alta.
"Como en el caso de muchos frutos secos, la fibra soluble de las nueces de macadamia puede actuar como un prebiótico, lo que significa que ayuda a alimentar a la flora intestinal beneficiosa. En compensación, estas amigables bacterias producen ácidos grasos de cadena corta, como el acetato, el butirato y el propionato, que reducen la inflamación y protegen contra enfermedades como el síndrome de colon irritable, la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa", describe Healthline.
Por último, este portal de salud recoge hasta tres condiciones en las que las nueces de macadamia han demostrado ser especialmente saludables. La primera de ella es en la prevención del cáncer gracias a dos componentes: los flavonoides y los tocotrienoles. La segunda condición es su capacidad para potenciar la salud cerebral, al considerarse que los tocotrienoles son beneficiosos para prevenir el alzhéimer y el párkinson. Por último, tomar a menudo nueces de macadamia "puede ayudar a recortar tu riesgo de morir prematuramente en aproximadamente un tercio", afirma Healthline.