Cada vez somos más conscientes de que hay que cuidar la alimentación. Las grandes empresas lo saben y, por eso, intentan adaptar sus productos a estas nuevas demandas de los consumidores. Mercadona es una de ellas y, entre sus últimas novedades, destaca una nueva leche capaz de ayudar a la flora intestinal por poco más que un euro.
Se trata de la leche fermentada Laban, que por 1,20 euros es el complemento ideal para aquellos que necesitan introducir en sus dietas productos respetuosos con el aparato digestivo. Además, al estar fermentada, es adecuada para personas intolerantes a la lactosa, ya que al pasar por un proceso de fermentación reduce considerablemente la cantidad de esta sustancia.
Llegados a este punto, probablemente muchos se estén preguntando, ¿qué es exactamente la leche fermentada? De origen árabe, la leche fermentada es aquella que ha pasado por un proceso de transformación a través de bacterias o levaduras.
En un primer momento, la fermentación se utilizaba como un método de conservación, pero con el tiempo se reparó en que los productos que habían pasado por este tratamiento potenciaban algunas de sus propiedades, además de añadirse otros beneficios, como la aparición de probióticos, microorganismos que tiene efectos positivos para la salud, como ayudar al sistema inmunitario.
En el caso de la leche, la transformación más importante que se produce es la fermentación de parte del azúcar en ácido láctico, además de que complica la supervivencia de organismos pocos beneficiosos y se potencian los beneficios de sus mejores componentes: calcio, fósforo y proteínas. Además, todos ellos se vuelven más digeribles.
Los productos fermentados son muy recomendables para problemas de salud relacionados con el aparato digestivo, como estreñimiento, diarreas o hinchazón abdominal. Asimismo, son perfectos para personas con digestiones pesadas, ya que, al estar parcialmente descompuestos, el organismo no tarda tanto en asimilarlos.
Entre las características nutricionales de la leche fermentada de Mercadona destaca su bajo contenido en grasas, 1,5 gramos por cada 100 mililitros. Sí que hay que prestar atención a su cantidad de azúcar, ya que posee 4 gramos por cada 100 milítros. Lo ideal para beneficiarse de sus bondades sería no añadir por nuestra cuenta más azúcar de la que ya lleva incorporada el producto.