El fin de semana del 12 al 14 estará marcado por la inestabilidad en la Península y Baleares, y un importante descenso de las temperaturas. El ambiente fresco ya se experimenta en la mitad norte, y se extenderá el sábado al sur según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Se esperan precipitaciones en el extremo norte peninsular que pueden llegar a ser de granizo y nieve en cotas altas. Serían persistentes en los litorales cántabro y vasco, así como en el norte de Navarra.
"El cambio de tiempo es inminente. Tras semanas de calor por encima de lo normal y apenas sin lluvias, se confirma que tendremos más actividad meteorológica en las próximas horas", anunciaba Marta Almarcha, meteoróloga de eltiempo.es. "La llegada de un embolsamiento de aire frío en altura aumentará la inestabilidad y volverá incluso la nieve".
Las precipitaciones que afectan a Galicia y las comunidades cantábricas desde primera hora del viernes, y los chubascos en el este de Cataluña y norte de Baleares, se irán extendiendo a lo largo del día en forma de tormentas en los Pirineos, sistema Ibérico y Central, y Meseta Norte. "Por la tarde se extenderán por gran parte del este y norte de la Península", precisa Almarcha.
La situación de inestabilidad se debe a un "pasillo térmico" que afecta a la Península, generado por la interacción entre una borrasca situada sobre el norte de Italia y el aire frío "que se cuela desde el norte", explica por su parte el meteorólogo Mario Picazo. Estas dos circunstancias "ayudarán a que estos próximos días veamos precipitaciones con frecuencia en zonas del norte y puntualmente en el este peninsular y Baleares". Zonas del sistema Central y del Ibérico también recibirían lluvias debido al "factor orográfico".
"Al ambiente (más invernal que primaveral de algunas zonas por los valores térmicos) habrá que sumar el factor viento que, en algunos casos, hará que el ambiente sea más frío aún", advierte Picazo. La cota de nieve rondará los 1.400 a 1.600 metros en zonas del norte peninsular, y se irá elevando a medida que descienda hacia el sur. No obstante, no se descartan nevadas puntuales en las cumbres de las montañas del centro.
Las temperaturas diurnas todavía rondarían "los 20ºC o más" en muchas capitales de provincia, e incluso mantendrían los 30ºC en zonas del sur. Sin embargo, es más probable que en el norte queden "más cerca de los 15ºC que de los 20ºC". Serán las temperaturas mínimas las que experimenten el mayor descenso. "Algunas capitales de la meseta norte como Burgos, Palencia o Soria (junto con Teruel) van a ver registros de un solo dígito, por debajo de los 5ºC", advierte Picazo.
Las tormentas más intensas las veremos en el este, especialmente "en zonas de Cataluña pero también llegando a la Comunidad Valenciana, Murcia y Baleares", advierte el meteorólogo. Finalmente, en el Cantábrico oriental y los Pirineos más occidentales también se esperan acumulaciones significativas.