Nadia Nerea Blanco Garau nació con tricotiodistrofia el 20 de abril de 2005. Esto es lo único de su historia que queda en pie después de una serie de revelaciones que esta semana han hecho a su padre pasar de celebrar la recaudación de más de 140.000 euros, para operar a su hija en un hospital de Texas, a acabar prometiendo devolver cada céntimo y pasar a ser investigado por presunto fraude.
En una semana llena de descubrimientos, el caso de Nadia y sus padres, que empezaron a aparecer en la prensa local ya en 2008, ha dado un giro tremendo gracias, en parte, a los comentarios en redes sociales finalmente enhebrados por periodistas de medios pequeños y grandes.
Esto es lo que ha pasado entre sábado y sábado.
Sábado 26 de noviembre
El diario El Mundo publica 'Cuando no hay nada para Nadia', un reportaje de Pedro Simón desgranando un nuevo episodio en la lucha de los padres de la niña, que, según su versión llevan gastados más de dos millones de euros viajando por todo el mundo en busca de una cura para esta rara enfermedad genética. Al final del artículo se incluía el número de cuenta de la asociación que los padres han montado para la causa.
La historia de Nadia logró una gran difusión en redes sociales gracias a la implicación de varios rostros conocidos.
El autor del reportaje ya había publicado otros artículos, en 2012, hablando de la niña Nadia y una campaña anterior en la que lograron recaudar 50.000 euros para, supuestamente, extender la vida de Nadia entre 5 y 10 años.
Domingo 27 de noviembre
Al día siguiente, Josu Mezo dedica al reportaje de Simón un exhaustivo repaso en su veterano blog Malaprensa. Más que criticar a bulto, Mezo va repasando párrafo a párrafo el artículo y señalando posibles inexactitudes y extractos verdaderamente fantasiosos:
Por ejemplo, reclutó a los más brillantes científicos y los juntó en las instalaciones del Centro de Investigación Aeroespacial de Houston para que trabajen para Nadia una hora a la semana. Por ejemplo, se llevó a la niña a Afganistán en mitad de la guerra -bajo las bombas y las balas- para convencer al especialista que le faltaba. Por ejemplo, logró hablar con el vicepresidente Al Gore para pedirle ayuda.
Otros lectores buscaron referencias de los médicos y científicos citados, sin encontrarlas. Aunque las críticas estaban centradas principalmente en el periodista de El Mundo, entre los comentarios comenzaron a aparecer referencias al padre de Nadia, Fernando Blanco Botana. En concreto, por unos juicios hipotecarios en Ibiza, 1999, años antes del nacimiento de la niña.
Lunes 28 de noviembre
Algunos periodistas comienzan a airear en Twitter sus dudas acerca de la veracidad de la historia de Nadia. Mientras, Fernando Blanco y su hija aparecen en diversos programas de televisión de La Sexta o Telecinco hablando de su campaña de recaudación.
Martes 29 de noviembre
El autor del reportaje sobre Nadia, Pedro Simón, publica en su periódico una columna titulada 'Olor a cadáver', lamentando (las negritas son las del original) que "el quehacer del viejo oficio, las cuatro o cinco normas eternas de la profesión, los códigos sagrados del tinglado; todo, digo, está siendo pasado por la parrilla del revisionismo tuitero. Como si fuera una venganza ancestral y ya hubiese llegado la hora de ponernos en nuestro sitio". Además de la columna, escrita el día anterior, Simón publica un artículo a media mañana avisando de que 'Nadia será operada gracias a un alud de ayuda anónima'.
Mientras, repasando artículos médicos publicados sobre la tricotiodistrofia en España, en la sección de ciencia de EL ESPAÑOL comprobamos que hay partes del relato de los padres de Nadia que no se corresponden con la realidad. Por ejemplo, ellos dicen que apenas hay entre 20 y 30 casos en todo el mundo, tres de ellos en España, pero este artículo de finales de 2012 en el International Journal of Trichology habla de que sólo el Hospital Clínic de Barcelona trata a 14 casos.
Aunque aparecen anonimizados, ninguno de ellos corresponde, por edad, con Nadia Nerea Blanco. Pese al testimonio de sus padres alertando de una muerte inminente si no se opera, en el estudio hablan de 21 casos con tricotiodistrofia -de hasta 47 años de edad- y de los que ninguno ha fallecido.
Miércoles 30 de noviembre
La periodista científica Ángela Bernardo asesta, desde Hipertextual, el siguiente golpe a la credibilidad de la historia de Nadia. Minuciosamente, Bernardo descuelga el teléfono y comienza a contrastar una a una las "inverosimilitudes y falsedades" del testimonio de Fernando Blanco, como que la niña tiene un 45% de las células de su cuerpo envejecidas o incluso la existencia de Edward Brown, calificado por Blanco como "el mejor genetista del mundo", o el doctor Del Campo, supuesto dermatólogo del Clínic al que la periodista tampoco logró encontrar.
Jueves 1 de diciembre
El jueves fue un día de aparente calma antes de la gran tormenta. Entreténganse mirando la correlación de búsquedas de "tricotiodistrofia" y "Nadia Nerea" en Google.
Verán cómo en 2012, 2014 y 2016 hay unos picos alrededor de diciembre. Coincide, nada misteriosamente, con campañas pseudo-navideñas como 'Un aguinaldo para Nadia', en 2012, donde músicos como Coque Malla o Russian Red participaron en una versión de All You Need Is Love, de los Beatles, cuya recaudación fue a parar a la asociación contra la tricotiodistrofia. O el libro 'Alas de mariposa', ilustrado por Javier Mariscal y editado días antes de diciembre de 2014.
Ambas iniciativas fueron obra del publicista Jorge Martínez, autor de campañas como 'Pastillas para el dolor ajeno' para Médicos Sin Fronteras, considerada la más exitosa de la historia de las ONG españolas.
Viernes 2 de diciembre
Los periodistas Manuel Ansede y Elena Sevillano publican el viernes por la tarde en El País 'La falsa cura de Nadia, la niña que conmovió a media España'. Este trabajo de investigación, que les llevó toda la semana (tras la publicación del post de Mezo, Ansede fue uno de los primeros periodistas en comentar en Twitter su estupefacción ante algunas de las afirmaciones del padre de Nadia) no sólo acabó de tirar por tierra la existencia de una terapia para tratar a la niña, sino que desveló además que el supuesto cáncer terminal que Fernando Blanco había decidido no tratarse para seguir apoyando a Nadia era otro camelo, y que el padre había tenido en el pasado varios litigios con la justicia por estafa y fraude.
Sábado 3 de diciembre
El desmentido de la historia por parte de estos dos periodistas forzó a El Mundo a mover ficha finalmente. Pedro Simón publicó una rectificación bajo el título de 'Disculpas y gracias', aunque sin llegar a explicar en detalle qué partes del reportaje original son las que estaban siendo rectificadas. Sin embargo, al mismo tiempo, el periódico publicó también una pieza llamada 'Papeles para Nadia' donde, de alguna manera, justificaban que la familia había aportado una cierta evidencia documental.
Esos papeles -algunos de ellos están disponibles en la página de Facebook de Fernando Blanco- contenían sin embargo más motivos para la sospecha, como una transferencia realizada de una cuenta de la asociación a otra cuenta de la misma asociación con el concepto "transferencia pago a cuenta cirujano".
Así es como, en apenas siete días, una historia de ocho años se ha disuelto. Sin embargo, el culebrón está lejos de finalizar. A última hora de ayer se conocía la intención de los Mossos de investigar a los padres de Nadia Nerea por supuesto fraude. El padre, en la página de la Asociación Nadia Nerea Contra la Tricotiodistrofia, definió como "oleada de ataques" las últimas publicaciones y escribía lo siguiente:
"Ahora mismo tengo la mente bastante llena de raros sentimientos e incluso de malos pensamientos sobre mi persona y la de mi hija para acabar de una vez con todo esto, hablo de los dos pues ni ella puede vivir sin mi ni yo sin ella, sé que a partir de ahora lo tendré mucho mas difícil para conseguir investigadores que accedan a realizar investigaciones para Nadia y probarlas en ella aunque estén prohibidas, pues varios así ya nos lo comunicaron".