El físico barbudo que arrasa en TikTok: "La ciencia de 'El Hormiguero' suma más que resta"
"En España, las universidades más pequeñas hacen ciencia de primer nivel" / "Aceptar el cambio climático no es ideología, es ciencia" / "Espero que 'Órbita Laika' se siga emitiendo si Vox llega al Gobierno".
14 octubre, 2023 02:25Anunciar los Premios Nobel de Física, explicar el proceso que hay tras un hielo derritiéndose o contar cómo funciona un detector térmico por infrarrojos. Por extraño que parezca, las tres acciones pueden convertirse en un vídeo de TikTok. Sí, esa red social en la que ya no se ve —o, al menos, únicamente— a centennials (jóvenes nacidos a partir del 2000) bailando la última canción que se ha vuelto viral entre esta generación. Y no sólo es que se puede consumir otro tipo de contenido, sino que además es posible tener una audiencia considerable. Que se lo digan si no a Adrián García (Palma de Mallorca, 1992), más conocido como El Físico Barbudo en TikTok, donde acumula más de 500.000 seguidores y casi nueve millones de 'likes' en sus vídeos de divulgación científica.
Ahora bien, la fama no siempre va acompañada del deseo que uno tiene. García confiesa que el vídeo largo es el que verdaderamente le gusta y consume. Esto no quita que sea consciente de que sin sus exitosas cifras en TikTok, tal vez no hubiera publicado su primer libro, Caos, orden y otras movidas del universo (Oberon), ni participaría en la sección de Física del programa Órbita Laika en La 2.
García atiende a EL ESPAÑOL por estos dos motivos de reciente estreno, aunque también podría haberlo hecho como precursor de un género musical, el de las canciones con temática científica. Entre su discografía se encuentran letras como "la física cuántica me ha jodido el cerebro" o "dicen que lo mío es investigación de campo, con lo que cobro estoy durmiendo bajo un árbol". También tiene empezado un sencillo de estilo reguetonero que lleva por título Perrea la onda.
La producción y composición musical no es la única habilidad de este polifacético físico. En su último año de carrera se apuntó a un concurso de monólogos científicos a nivel nacional, en el que llegó hasta la semifinal. Años más tarde, entró a formar parte del grupo de monologuistas científicos Big Van ciencia, puesto que, como apunta García, ser gracioso y científico no son incompatibles. Spoiler: cuenta un chiste científico a lo largo de la entrevista.
A pocos meses de terminar el instituto, cuenta en un vídeo que sus padres le dijeron "estudia lo que quieras, que luego trabajarás de lo que puedas". No siempre se tiene esta suerte.
No, la verdad es que he tenido muchísimas suerte con mis padres. Siempre me han apoyado en todo y se han encargado de estimularme intelectualmente desde pequeño. El consejo que me dieron me parece muy bueno y cuando me invitan a algún instituto intento trasladarlo. Hay veces en las que algunos padres se encierran en el "tienes que estudiar algo con futuro". Pero es mejor estudiar acerca de lo que te guste y luego ya se verá cómo convertirlo en una profesión.
¿Trabaja de lo que puede o de lo que quiere?
Tengo una suerte increíble porque trabajo de lo que me gusta. No me podría haber ido mejor.
Además de su proyecto personal de 'El Físico Barbudo', es técnico de comunicación y divulgación en el Instituto de Física Interdisciplinar y Sistemas Complejos (IFISC). Sin esto último, ¿podría vivir de la divulgación científica?
No lo sé. Es cierto que mi trabajo en el IFISC es lo que me da un sueldo fijo. El resto no deja de ser una afición y me lo tomo como tal. Esto hace que no sienta la presión que tienen otros compañeros: publicar vídeos todos los días, que funcionen bien, tener que decir que sí a promociones que igual no te convencen. En mi caso, tengo la suerte de colaborar con las marcas que quiero. Y si no me salen ideas, no me esfuerzo en crear vídeos. No estoy nada atado.
¿Se puede vivir de la divulgación científica en España?
Se limita a unos pocos privilegiados. Pero está cambiando afortunadamente; sobre todo en las instituciones públicas, que forman la parte más invisible de la divulgación. Hay universidades pequeñas, como en la que yo trabajo [la Universidad de las Islas Baleares (UIB)], que están apostando cada vez más por incorporar estos perfiles. Aunque muchas veces las condiciones no son las que nos gustarían.
En una de sus canciones científicas dice lo siguiente: "Dicen que lo mío es investigación de campo, con lo que cobro estoy durmiendo bajo un árbol". Haciendo el símil futbolístico, ¿cree que España está en la Champions League de la ciencia?
En el campo de los sistemas complejos, que es el que más conozco, diría que sí. En Física también se hace una muy buena labor. Por ejemplo, un grupo de investigación de la UIB fue pionero en España en el estudio de las ondas gravitacionales. Por tanto, incluso en las universidades más pequeñas se hace ciencia de primer nivel.
¿Cómo surge la idea de hacer canciones científicas?
Fue en el instituto, de una forma un poco estúpida. Una profesora de inglés nos dijo que hiciéramos una redacción y la recitáramos en clase sin leerla. A mí la memoria siempre se me ha dado fatal. Pero de las canciones (aunque sea en inglés) me acuerdo, por lo que decidí convertir la redacción en canción. Me llevé la guitarra y la toqué delante de la clase.
Ahí fue cuando surgió el germen. No tengo formación musical, pero sí que me gusta cacharrear. Me fascina que a día de hoy cualquiera pueda grabar una canción en casa con su ordenador. Me vuela la cabeza. Así que me pareció novedoso y gracioso el combinar la afición por la producción musical con la divulgación científica. Me pareció algo novedoso, gracioso y que no hace mucha gente. Creo que funciona bien y yo me lo paso bien haciéndolo. Es lo más importante.
Participó en un concurso de monólogos científicos y forma parte del grupo de monologuistas científicos Big Van ciencia. ¿Se puede ser científico y tener gracia?
Sí. Desconozco si ha sido intencionadamente, pero muchas personas que se dedican a la divulgación y a la investigación a día de hoy tienen una imagen muy alejada del estereotipo de científico. Es muy positivo el ver que la ciencia puede hacerla cualquiera. No tiene porqué ser un señor blanco, con bata y que no sabe pillar una broma. Ahora hay gente de todo tipo, que le gusta la escalada, el heavy metal o perrear. Debemos transmitir el mensaje de que para ser científico no hay que dejar de ser guay. Se puede ser gracioso y científico.
¿Puede contarnos un chiste científico?
¿Por qué los físicos cuánticos nunca tienen sexo? Porque cuando encuentran el momento no encuentran la posición, pero cuando encuentran la posición no encuentran el momento.
¿Por qué sería capaz de quitarse su tan característica barba?
Estaría complicado. Quizás si hubiera alguna ONG que se comprometiera a donar muchísimo dinero a alguna causa que me llamara la atención, me lo podría plantear.
¿Se puede hacer divulgación científica en España sin derivar en un conflicto de intereses?
Creo que se puede vivir de la divulgación sin hacer promociones con empresas. Aunque igual no es tan fácil. No sé si conozco a alguien que viva sólo de lo que le genere los vídeos de las plataformas. Muchas veces los ingresos de las plataformas no te dan ni para cubrir costes. Al final, cada cual tiene sus líneas rojas e intenta que sea de valor, no con colaboraciones de criptomonedas u otros temas que sean una estafa.
¿En qué momento se le ocurre escribir un libro sobre algo tan complejo (valga la redundancia) como los sistemas complejos?
Ya había tenido varias propuestas para escribir libros del espacio para niños. Pero tenía claro que si escribía uno, iría sobre los sistemas complejos. Además de para explicar qué son, también creo que es necesario explicar que hoy en día se hace Física mezclada con otras cosas. Cuando conozco a una persona y le digo que soy físico, suelo escuchar comentarios del tipo "a mí los números se me daban fatal" o me preguntan cosas de física cuántica o del espacio. Y son temas de los que no tengo ni idea.
¿Qué relación tienen los Power Rangers con los sistemas complejos?
Hay una rama dentro de los sistemas complejos que se encarga del estudio de la lingüística. Quería mezclarlo con mis intereses, por lo que me descargué los subtítulos de todos los episodios de los Power Rangers para analizar cómo se distribuyen las palabras. También es posible saber en qué minuto del capítulo se transforman en Power Rangers.
Se nota que lo ha hecho por afición.
Sí, sí [se ríe]. No creo que nadie me fuera a obligar a hacer esto.
¿Por qué existe una lucha de egos entre las distintas ramas de la ciencia, como denuncia en su libro?
Daría para largo. Es algo que me he encontrado siempre. Incluso desde la carrera, tanto en profesores como en estudiantes. De hecho, yo también lo fui durante una época. Piensas "la Física la ciencia más pura porque describe las leyes del universo, que lo engloba todo". No sé por qué existe esta lucha de egos. Supongo que a todo el mundo le gusta sentir que lo que ha hecho es lo más importante.
¿Dónde se encontraba cuando le propusieron tener una sección en Órbita Laika?
Estaba en mi casa trabajando. Me tuve que sentar. Cuando empecé a ver Órbita Laika, yo era estudiante de Física en la universidad y ahora tengo una sección. Últimamente me están saliendo tantos proyectos buenos que no me da tiempo a asimilarlo del todo.
¿Siente el llamado síndrome del impostor?
Sí, y tengo asumido que lo voy a sentir siempre. Desde que me llamaron para tener una sección en una radio autonómica estoy con esa sensación.
¿Cómo ha impactado El Hormiguero en la divulgación científica?
Igual no es la divulgación científica de máxima calidad ni la que a mí me gustaría hacer. Tampoco es un contenido que consuma ni que me prestaría a hacer. Porque cae un poco en la ciencia-espectáculo. Lo hace todo muy grande, muy visual. Y la ciencia, la mayoría de las veces, no es así. Aunque también soy de la opinión de que suma más que resta. Puede encender la chispa de la curiosidad tanto en los jóvenes como en personas mayores.
¿Se puede hacer divulgación científica en TikTok?
Es otro de los grandes debates. Al igual que con El Hormiguero, creo que suma más que resta. Te permite llegar a un público muy amplio que, en principio, no está buscando nada acerca de ciencia. Además, no es un contenido muy denso ni con muchas explicaciones. Un minuto da para lo que da. Pero muchas de las oportunidades que te surjan puede ser porque tengas números en redes sociales. Por ejemplo, yo soy consciente de que si no me hubiera ido tan bien en TikTok, no hubiera publicado el libro ni hubiera aparecido en Órbita Laika.
¿Y pueden convertirse en un caldo de cultivo de contenido pseudocientífico?
Sí, porque eso creo que es importante que haya divulgadores en las redes sociales. Muchas veces he leído críticas a cuchillo contra las personas que hacemos vídeos en TikTok como diciendo "cómo vas a enseñar algo en un minuto, que eso no es divulgación ni es nada". Puede ser que tengan razón. Pero si los divulgadores científicos no ocupamos el espacio en estas redes, lo hará otra gente con intereses un poco más chungos. Siempre voy a preferir que un físico cuántico haga un vídeo antes que te venga alguien a vender cualquier porquería de pseudociencia.
¿Qué opinión le merece Jorge Rey, el joven que 'predice' el tiempo mirando hormigas?
No conozco este caso en concreto. Pero el problema está en que si el contenido funciona en redes, se crea un bucle. Si transmito información falsa, pero recibo visitas y notoriedad que van a hacer crecer mi proyecto, lo voy a seguir haciendo. Muchas veces creo que desde la divulgación se cae un poco en dar mucho voz a discursos minoritarios que se hacen más grande de lo que deberían ser precisamente porque se les está dando bombo, aunque sea para criticarlo.
Es como ir a la televisión a debatir con terraplanistas. ¿Sí o no? Hay gente que iría porque piensa que si no vas, no estás ofreciendo al público los datos correctos. Aunque también están los de la opinión de que si acudes, le das notoriedad.
¿Usted acudiría a ese debate?
No iría porque estoy seguro de que me humillarían en directo. En muchos casos, es gente que vive para eso. Su personalidad es defender una teoría conspiranoica, como, por ejemplo, la de que la Tierra es plana. Yo puedo ir con mis conocimientos, pero no es algo en lo que piense cada día, por lo que seguro que me pillan por alguna parte.
¿Cómo nos puede afectar el cambio climático en el futuro?
Bueno, ya no es en el futuro, sino en el presente. Estamos a octubre y yo estoy casi en calzoncillos por mi casa. No soy experto en cambio climático, pero es cierto que la situación pinta bastante regular. Desde el aumento de las temperaturas hasta un mayor número de fenómenos meteorológicos extremos, pasando por sequías, enfermedades tropicales. Todo un catálogo de catástrofes que se pueden ir viniendo.
¿Entiende que haya gente que siga negando su existencia?
Probablemente hace un par de años hubiera respondido que sí. Pero a día de hoy, con el impacto que tiene, empiezo a pensar que quien no lo ve es porque no quiere.
¿Qué piensa de que la presidenta de las Cortes Valencianas y diputada por Vox, Llanos Massó, niegue el cambio climático?
Pues que hace falta un poco más de humildad. Yo no me vería capaz de ir en contra de toda la comunidad científica. No conozco a esta señora. Pero no va en la línea de lo que he escuchado de la comunidad científica.
¿Cree que se seguiría emitiendo Órbita Laika de llegar Vox al Gobierno de España?
Espero que sí. Me parece un programa bastante apolítico. La ciencia no debe tener ideología política. Que luego distintos partidos políticos se apropien de posturas acientíficas o nieguen el cambio climático, pues... Es que eso no tendría porqué ser ideología, es ciencia.