No es fácil colarse en una lista de mejores de todo el mundo, pero si es de vinos, con toda la cantidad que existen, el reto es aún mayor. Eso es lo que ha conseguido un tinto de Ribera de Duero. Han sido los editores de Wine Spectator, como cada año, los que han realizado un ranking tras catar vinos de todo el mundo durante los 12 meses anteriores. Así, han realizado una clasificación de 100, basándose en la calidad, el valor, la disponibilidad y las emociones que les provocan. Esta lista anual rinde homenaje a bodegas, regiones y añadas de éxito en todo el mundo.
Pues en este centenar de vinos tintos, solo han conseguido entrar cinco españoles, y uno de ellos es de Castilla y León, concretamente de Burgos. En Villalba de Duero se encuentra el vino Bela, que toma el mismo nombre de la bodega en la que se elabora, perteneciente al grupo CVNE desde 2021 y ubicada en medio de la Denominación Ribera del Duero.
Ahora, a toda su historia, se suma este galardón. Se ha convertido en el único tinto Ribera del Duero que figura entre los 100 mejores vinos del mundo en 2023 según la prestigiosa revista americana Wine Spectator. Solo 5 vinos españoles han podido colarse en este top 100 internacional y, de ellos, Bela ostenta el privilegio de ser el único Ribera, escalando hasta el puesto 79 de la exclusiva lista. Como curiosidad, un Brunello di Montalcino de Italia vuelve a ser el mejor vino del mundo.
En las catas a ciegas de 2023 los editores de la revista estadounidense Wine Spectator probaron más de 9200 vinos, de los que 5819 obtuvieron noventa puntos o más. Esa fue la base para crear esta lista tras analizar cuatro aspectos: calidad, calidad-precio, disponibilidad y, especialmente, el llamado factor X (la relevancia y la historia de fondo de los vinos).
Se trata de un vino que se elabora con uvas de las 74 hectáreas de viñedo en propiedad de la bodega de Villalba de Duero y que aúna la redondez, el equilibrio y la historia de una región icónica en el mundo del vino. Bela, tanto la bodega como el vino que lleva su nombre, es además un homenaje a los antepasados de la familia de CVNE, ya que el nombre de la bodega hace honor a Sofía, hija del cofundador de la bodega en el año 1879 Eusebio Real de Asúa, y a su vez bisabuela de los actuales responsables, a quien en el entorno familiar llamaban “Bela”.