Viajes National Geographic realiza un viaje por la España menos poblada y por sus principales pueblos, donde encontrar lugares Patrimonio de la Humanidad y degustar algunos de los principales platos de la gastronomía. Realizada bajo los criterios editoriales de los diferentes miembros de Viajes National Geographic, esta lista incluye a la villa salmantina de Mogarraz entre los 100 pueblos más bonitos de España

Mogarraz se ha convertido en 'el pueblo de las mil caras' gracias a la obra pictórica del artista local Florencio Maíllo, que recuperó las fotografías que, a finales de los años 60, Alejandro Martín, alcalde mogarreño por entonces, creó un archivo fotográfico de todos los vecinos del pueblo que no habían emigrado a la ciudad, y las reprodujo a gran tamaño. Ahora, Maíllo las ha fijado en las fachadas donde vivían sus antiguos propietarios. Estas imágenes, expuestas en las paredes exteriores de las viviendas, dan vida a los recuerdos y experiencias de generaciones pasadas, conectando el presente con el pasado de manera tangible y conmovedora.

Mogarraz, un rincón encantador en la Sierra de Francia, teje sus historias entre callejuelas empedradas y casas de piedra que parecen susurrar secretos ancestrales al viento. Este pintoresco pueblo salmantino, enclavado en un valle de bosques frondosos y aire puro, cautiva al visitante con su atmósfera de paz y tradición.

El sonido sereno del agua que fluye en sus fuentes antiguas invita a la reflexión, mientras que los aromas de la cocina tradicional serrana se cuelan por las estrechas calles, tentando con sabores auténticos y generosos. La plaza Mayor, corazón vibrante de la villa, es testigo de la vida cotidiana, donde vecinos y visitantes se entrelazan en conversaciones amenas bajo la sombra de centenarios árboles.

Una de las calles de Mogarraz, con algunos de los retratos al fondo David Arranz Ical

Los alrededores de Mogarraz ofrecen un regalo para los sentidos: caminos serpenteantes que atraviesan bosques de robles y castaños, donde el verde esmeralda de la vegetación contrasta con el azul intenso del cielo. Desde los miradores naturales se contempla un paisaje que parece sacado de un lienzo, con montañas que se perfilan en el horizonte y valles que invitan a la exploración pausada y respetuosa.

La esencia de Mogarraz reside en su capacidad para preservar la esencia de lo auténtico, para celebrar las raíces que la conectan con sus orígenes más profundos. Cada piedra cuenta una historia, cada calleja guarda un secreto, y cada habitante lleva consigo el orgullo de pertenecer a un lugar que se niega a olvidar sus raíces.

Visitar Mogarraz, uno de los cien pueblos más bonitos de España, es más que un viaje físico; es una travesía emocional que invita a reconectar con la historia, la naturaleza y la autenticidad de un pueblo que late con el corazón de sus gentes. Es descubrir la belleza en lo sencillo y la magia en lo cotidiano, dejándose envolver por el encanto etéreo que solo lugares como este pueden ofrecer.

Conjunto Histórico | Mogarraz 5 L. Falcao