Todo es prevención, y más cuando se trata de asuntos relacionados con la industria nuclear. Por eso, la fábrica de Enusa en Juzbado simula un accidente de criticidad por derrame de polvo en su simulacro anual de emergencia. Esta actividad forma parte de los requerimientos del Plan de Emergencia Interior de la instalación y se ha desarrollado dentro de la normalidad, apuntan desde la propia empresa.



Todo comenzó a las 10:30 horas de hoy viernes, cuando la fábrica de combustible de Juzbado comenzó el simulacro anual de emergencia. El suceso se inicia durante unas maniobras en el almacén de polvo de óxido de uranio. Se produce un impacto de una carretilla con el camino de rodillos del almacén de cuarentena que provoca que cuatro bidones de polvo caigan al suelo y se abran, además de que se derrame un bidón con 40 litros de aceite que transportaba la carretilla.

Dos personas que se encontraban en el área dan el aviso y se dirigen de manera preventiva a la Sala de Descontaminación. En esos momentos, se declara una primera situación de Alerta de Emergencia Categoría II por "derrame de polvo de óxido de uranio que haya originado inhalación o que pueda suponer riesgo de inhalación o de criticidad en las actividades posteriores al accidente”.

Se lleva la instalación a condiciones estables y seguras, parando el movimiento de material nuclear en las zonas Cerámica y Mecánica, así como los equipos de proceso, y se lleva la instalación de Modo de Operación 1 a Modo de Operación 4.

Como consecuencia de la caída de los bidones, se confirma que las dos personas que se encontraban en el área han resultado contaminadas de manera superficial, por lo que requieren asistencia del Servicio Médico de la instalación.

Además, el derrame de aceite termina mezclándose con la acumulación de polvo en el suelo, provocando un accidente de criticidad y desencadenando la declaración de una situación de Emergencia de Emplazamiento, Categoría III.

Los equipos de emergencia valoran la situación y definen las acciones a poner en marcha para volver a la normalidad. En ese momento, se declara el fin del simulacro, que se ha desarrollado correctamente y dentro de la normalidad.

El simulacro forma parte del Plan de Emergencia Interior de Juzbado. Este tipo de actuaciones se realizan periódicamente en las instalaciones nucleares para comprobar el correcto funcionamiento de la Organización de Emergencia, la disponibilidad de los medios y la coordinación con los organismos implicados.