La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, ha visitado hoy el monasterio de los Carmelitas Descalzos de Las Batuecas, para interesarse por la situación actual del inmueble y de los frailes residentes, tras el incendio que hace dos semanas asoló el entorno del parque natural Las Batuecas-Sierra de Francia en el que se encuentra ubicado el monasterio.

Posteriormente, la delegada se ha trasladado a la localidad de La Alberca, donde ha firmado en el Libro de Honor del Ayuntamiento, para agradecer a los vecinos de este municipio todo el apoyo prestado durante el incendio que se inició el 11 de julio en la comunidad autónoma de Extremadura, pasó a la provincia de Salamanca esa misma tarde y hasta ayer por la mañana no ha sido declarado de nivel 0.

En la visita al monasterio de San José, Virginia Barcones ha estado acompañada por la subdelegada del Gobierno en Salamanca, Encarnación Pérez, por el alcalde de La Alberca, Miguel Ángel Luengo, y por el comandante jefe accidental de la Guardia Civil de Salamanca, Igor de la Casa, en representación de los efectivos estatales que prestaron auxilio y colaboraron en apagar los fuegos.

Fueron precisamente agentes de la Guardia Civil, los que evacuaron a los 10 religiosos del monasterio en la tarde del 14 de julio pasado y los trasladaron a la localidad de La Alberca, donde pasaron la noche, en la parroquia y en viviendas de familias del municipio. Los frailes fueron evacuados ante la proximidad de uno de los dos focos secundarios del incendio forestal en el parque natural de Las Batuecas-Sierra de Francia. Al día siguiente, los religiosos pudieron regresar al monasterio, un edificio que data de 1599 y en cuyo interior hay valiosas esculturas y pinturas, así como un retablo del siglo XVII, comprobando que había sido protegido de las llamas por los equipos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y del Ministerio de Transición Ecológica y para el Reto Demográfico (Miteco) movilizados en la zona para defender el monasterio del fuego junto con unidades de Incendios forestales de Castilla y León (Infocal).

La delegada ha conocido las circunstancias en las que se produjo la evacuación, la defensa del inmueble de las llamas y el regreso al monasterio a través del testimonio de los frailes, quienes también han querido agradecer personalmente ante la representante del Gobierno de España los medios desplegados para proteger el monasterio y, por extensión, para luchar contra el fuego en el área del parque natural de Las Batuecas-Sierra de Francia afectada por las llamas. Ha sido el prior de la comunidad de Carmelitas Descalzos que residen en el monasterio, Francisco Brandle, el encargado de reconocer el gran trabajo de los equipos humanos y el amplio dispositivo de medios materiales que ha aportado el Gobierno de España en este incendio que afectó simultáneamente a Extremadura y a Castilla y León y que exigió la constitución de un Mando Unificado de Extinción, que se instaló en El Paso de los Lobos, en Salamanca, para la correcta operatividad de los medios extraordinarios de titularidad estatal que se pusieron a disposición de las comunidades autónomas.

Curso de la Escuela Nacional de Protección Civil y mejora en los accesos

La delegada ha puesto en valor el trabajo de todo el dispositivo de medios humanos y materiales movilizados a petición de las comunidades autónomas para ayudar en la extinción de los incendios y ha propuesto a la comunidad de carmelitas descalzos, la realización el próximo otoño de un curso sobre incendios, en el propio monasterio, impartido por la Escuela Nacional de Protección Civil.

Asimismo, y a petición de los religiosos, Virginia Barcones se ha comprometido a buscar soluciones para reformar algunas deficiencias existentes en el monasterio y también para mejorar los accesos al mismo con el objetivo de facilitar la llegada de equipos y vehículos de extinción de incendios o de otros servicios de protección que se requieran, ante la posibilidad de que en el futuro se repita una situación como la vivida hace dos semanas, en la que algunos vehículos de bomberos tuvieron dificultades para aproximarse al edificio.

Barcones ha detallado a los religiosos que en el incendio forestal focalizado en Monsagro, la Guardia Civil movilizó cerca de 850 agentes en los días más intensos del incendio, manteniendo cien o ciento diez agentes diariamente durante los 6 primeros días, y 75 cada uno de los 4 días siguientes, “para ocuparse de todos los aspectos relacionados con la seguridad ciudadana de los habitantes de los pueblos afectados, de darles información, de su evacuación y traslado, y también en el caso del monasterio de San José. Además han desarrollado una labor decisiva de seguridad en las carreteras, con cortes y desvíos que se han tenido que ir realizado para evitar el acceso de los ciudadanos a zonas en riesgo, y facilitando el tránsito a las unidades terrestres de lucha contra el fuego que se han movilizado”.

Por parte de la UME, ha habido más de 1.700 militares en la provincia de Salamanca durante esa semana del 11 al 17 de julio, puesto que estaban trabajando en el incendio de Monsagro pero también en el que se producía simultáneamente en la zona de Candelario. “El jueves, 14 de julio, que fue el día más complicado, hasta 423 militares apoyaron las labores de extinción en esta provincia, utilizando más de 150 medios terrestres”, ha señalado la delegada, subrayando que “el Gobierno de España ha estado, está y estará para ayudar y si las circunstancias han requerido que se incorporasen más militares y más vehículos, así lo hemos hecho, porque siempre que sea necesario, aportaremos todos aquellos medios precisos para acabar lo antes posible con las llamas que devastan nuestro patrimonio”.

“Una vez que se fue reduciendo el nivel más intenso alcanzado por el incendio de Monsagro –ha explicado Barcones–, se fueron desmovilizado proporcionalmente los efectivos aunque también se han incorporado otros, nuevos, como el Mando de Ingenieros desplegado en la Operación ‘Apoyo Lucha Contra Incendios Forestales’, del Ministerio de Defensa, compuesto por patrullas de vigilancia y observación  en las zonas susceptibles de sufrir incendios forestales  en la provincia de Salamanca.  Las patrullas están constituidas  por personal y medios del Regimiento de Especialidades de Ingenieros nº 11 y de la Compañía de Cuartel General del MING, con guarnición en Salamanca,  para colaborar en la prevención de incendios y contribuir a la seguridad de la población y a la preservación de los medios materiales y el medio ambiente. Esta misión de vigilancia tendrá una duración de 15 días (desde el 27 de julio) que serán prorrogados si fuese necesario”. 

Por lo que se refiere al Ministerio de Transición Ecológica y para el Reto Demográfico, la movilización también ha sido muy amplia desde el primer día en que se declaró el incendio, aumentando progresivamente los efectivos y los medios terrestres y aéreos, ha confirmado la delegada: “El fatídico día 14 de julio, en el que fueron evacuados los carmelitas descalzos de Las Batuecas, el Miteco había asignado a este incendio 3 BRIF-A, brigadas helitransportadas grandes, compuestas por 2 helicópteros de 10/12 plazas y 1.500 litros de capacidad; 2 aviones anfibios de 5.500 y 6.000 litros y otros dos de 3.100 litros, dos helicópteros bombarderos de agua, de 4.500 litros y un Equipo de Planificación y Análisis de Incendios Forestales. Ese día, los medios de apoyo del Miteco superaron las 200 personas y contando con todos los demás efectivos citados, Guardia Civil y UME, eran cerca de 750 personas, 11 medios aéreos y más de 150 medios terrestres”.

Barcones se ha referido, asimismo, a las y los trabajadores de la AEMET (Agencia Estatal de Meteorología) que también juegan un papel decisivo en las labores de extinción de los incendios, elaborando boletines específicos para cada zona concreta en la que se está produciendo un incendio, con las predicciones de nubosidad y precipitación, temperaturas, viento y humedad, que permiten a los operativos de coordinación tomar las decisiones más adecuadas para enfrentarse al fuego.

FIRMA EN EL LIBRO DE HONOR DE LA ALBERCA

Tras la visita al monasterio, Virginia Barcones ha acudido al Ayuntamiento de La Alberca, y allí ha firmado en el Libro de Honor que le ha ofrecido el alcalde, Miguel Ángel Luengo, para reflejar “el reconocimiento y la gratitud que se merecen los vecinos y vecinas de este municipio, por su solidaridad y el ánimo que han derrochado con todas las personas que han alojado en sus casas a causa de los incendios, pero también por su colaboración en las labores de extinción y por el afecto hacia todos los hombres y mujeres que han estado trabajando sin descanso para luchar contra las llamas, hacia esos servidores públicos que salvan vidas y patrimonios y que son un ejemplo de profesionalidad, vocación de servicio y compromiso con la sociedad”.

En este sentido, Virginia Barcones ha insistido en “la importancia de tener unos servicios públicos fuertes. Es fundamental el trabajo que hacen nuestras Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, los servicios de Protección Civil, la Guardia Civil, la Unidad Militar de Emergencias del Ejército, del Ministerio de Defensa y también las brigadas, que están trabajando y luchando en primera línea para defender las vidas y los patrimonios individuales y colectivos”.

La delegada también ha ratificado el compromiso del Gobierno España con la restauración de la pérdida medioambiental y con la recuperación del tejido social y económico que representan los incendios, poniendo numerosas ayudas y bonificaciones a disposición de las personas, empresas y entidades afectadas y agilizando su gestión.