Asaja Salamanca comunicaba hace apenas un día varios ataques de lobo, buitres y meloncillos repartidos por la orografía salmantina. Y, de nuevo, la organización lamenta un caso más de los prejuicios que causa la fauna salvaje sin control. En esta ocasión, se trata de una especie carnívora e invasora que ataca en manada al ganado: los meloncillos, quienes se han saldado con la vida de una becerra en la localidad de Sorihuela, perteneciente a la comarca de Sierra de Béjar.
Los afectados que poseen una titularidad compartida se han encontrado este jueves, 23 de diciembre, con la becerra, de una semana, agonizando. “Acabábamos de estar en la explotación, hemos salido a hacer unos papeles y, cuando hemos llegado, la madre estaba apartada sin saber qué hacer con becerra”, afirman. “A los pocos minutos a muerto, no podíamos hacer nada por ella”.
Los ganaderos aseveran que el ataque ha sido provocado por los meloncillos, ya que es el ‘modus operandi’ de esta especie. “La zorra no es, porque tendría mordida la cabeza o las orejas. Son los meloncillos. Está claro”. “No hemos llamado a la Patrulla de Seguimiento porque lo hemos hecho otras veces y no nos hacen caso”.
Asaja Salamanca vuelve a insistir en la necesidad de dar respuesta rápida y eficaz a los ataques de la fauna silvestre, que, si no es gestionable por ser protegida, la Junta de Castilla y León debería hacerse cargo de los gastos en los que se incurren. “No es de recibo que mueran animales sin que nadie se responsabilice de los hechos”, han asegurado fuentes de la organización agraria. “La solución pasa por pisar más el campo, ir a comprobar los ataques y disponer de un sistema de compensación por los daños causados, teniendo en cuenta, además, el lucro cesante”, ha insistido Juan Luis Delgado, presidente de la organización.