El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha defendido hoy la digitalización y las energías renovables como herramientas para mejorar la rentabilidad de las explotaciones agrarias, argumentando la necesidad de hacer un uso cada vez más eficiente del agua.
"Tenemos que ser capaces de aplicar nuevas tecnologías para aprovechar mejor el agua", ha remarcado el ministro en su visita a las obras del sector VII en el Canal del Páramo Bajo de León.
Planas ha asegurado que el Gobierno de Pedro Sánchez tiene la voluntad de hacer "todo aquello que esté en nuestra mano para mejorar el regadío y la rentabilidad de las explotaciones agrarias. Si no lo conseguimos, tenemos un problema de futuro".
"La vía del medio y largo plazo pasa necesariamente por las energías renovables. En buena parte del regadío, en las propias balsas, se dispone de placas fotovoltaicas y elementos que contribuyen a disminuir el coste energético", ha asegurado Planas.
Sin embargo, el ministro también ha querido incidir en que "no hay una solución mágica, la única posible es conseguir la eficiencia energética a través de las energías renovables y eso significa una mayor inversión", para lo cual ha recordado que habrá que "aprovechar los fondos de recuperación".
En este sentido, Planas ha recordado que "el regadío tiene que ser rentable y productivo por lo que cobra especial importancia actuaciones como ésta", en referencia a las casi 24.000 hectáreas que suponen el conjunto de la intervención en el Canal del Páramo Bajo que hoy visitó.
Planas, quien recordó que Castilla y León acapara el 26,7% de las actuaciones en materia de regadío que se llevan a cabo en España, ha comentado, además, que la Comunidad recibirá 83 millones de euros para proyectos relacionados con esta materia procedentes del Fondo de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Obras paralizadas
El presidente de la Comunidad de Regantes del Páramo Bajo, Herminio Medina, ha aprovechado la visita del ministro para pedir la ejecución de las obras que están paralizadas, como las de las balsas del río Órbigo o las de los embalses de las Cuezas en la cuenca del río Carrión.
"Eso no se puede dejar paralizado porque sería una guerra si vienen años aún más secos. No podemos hacer todo de hoy para mañana porque sin agua no hay vida", ha recordado.
Medina también ha aprovechado para trasladar al ministro que los agricultores ahorran el agua que pueden para garantizar el suministro cuando escasea y defendió que los campos de la provincia tienen que tener prioridad sobre el resto.
"Este pantano de Riaño se va quedando corto. La vaca ya no da más leche. Nos quieren llevar el agua para Valladolid y Palencia. Primero tenemos que regar León", ha manifestado antes de recordar que la comunidad que dirige "está hipotecada con el banco para muchísimos años, con créditos por más de 60 millones de euros" por las obras acometidas.