Ingresa en prisión incondicional Pompeyo, el presunto autor de las cartas bomba
Está acusado por el envío de artefactos explosivos dirigidos a seis instituciones y dirigentes políticos. Está acusado de un supuesto delito de terrorismo
27 enero, 2023 14:25Noticias relacionadas
El Juzgado de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional ha acordado la entrada en prisión incondicional de Pompeyo González, el jubilado de 74 años detenido en Miranda de Ebro acusado del envío de cartas bombas al presidente del Gobierno, la ministra de Defensa, las embajadas de EEUU y Ucrania, el Centro de Satélites de la UE en Torrejón de Ardoz y a la empresa de armamento Instalaza en Zaragoza. Está acusado por un presunto delito de terrorismo.
La investigación se abrió el pasado mes de noviembre, cuando se detectaron las primeras cartas que, cabe recordar, una acabó hiriendo a un trabajador en una mano al abrir la carta, aunque este pudo darse cuenta rápidamente de lo que se trataba y explotó a unos dos metros de distancia.
Los primeros trabajos, coordinados por la Comisaría General de Información, se llevaron a cabo a través de diferentes líneas indagatorias en diversas provincias del territorio nacional. Una vez esclarecer que las cartas estaban enviadas por una misma persona al ver que las características técnicas obedecían a un mismo patrón, la investigación se orientó a centras las localidades desde donde se habían hecho los envíos. Seguidamente, comprobaron que al menos tres de las cartas se enviaron desde Burgos.
Tras ubicar la ciudad de origen, la investigación de la Policía comenzó a realizar un exhaustivo análisis de la trazabilidad de los componentes de las mismas: sellos, elementos que integraban los artefactos artesanales y los sobres.
Finalmente, todo ello permitió identificar al arrestado como presunto autor del envío de las cartas explosivas y de la fabricación de los artefactos explosivos que contenían. De esta manera, dieron con Pompeyo González, un jubilado de 74 años de Miranda de Ebro, exfuncionario del Ayuntamiento de Vitoria y "prorruso", tal y como le definieron algunos de sus vecinos con los que se puso en contacto este periódico. Igualmente, en el marco de la operación, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado pudieron determinar que era una persona muy activa en redes sociales y con conocimientos informáticos y técnicos.
Por ello, el Juzgado Central de Instrucción número 4 autorizó la entrada y registro del domicilio de este jubilado. En su interior encontraron un taller con herramientas, elementos metálicos, soldaduras y tornillería compatibles con la confección de las cartas bombas remitidas, lo que sumado a las evidencias y datos obtenidos durante la investigación corroboraría su participación, por un lado, en el envío de estas seis cartas explosivas citadas y, por otro, la ejecución de actos preparados dirigidos a la fabricación de nuevos artefactos.
La investigación presupone que el detenido ha confeccionado y realizado los artefactos en solitario, ahora bien, no descartan que pudiera estar influido por terceras personas, según remarcan en un escrito.