Castilla y León promoverá una serie de medidas relacionadas con el fomento de la natalidad y el apoyo a las familias. Para ello, la Junta de Castilla y León pondrá en marcha una asistencia por psicólogos clínicos para las madres gestantes, se implantará un protocolo de latido fetal dentro de la atención en el primer trimestre, se promoverá el acceso a la ecografía 4D de las mujeres gestantes y se velará por respetar la objeción de conciencia de los profesionales que no deseen participar en la prestación de la interrupción voluntaria del embarazo. Los médicos estarán obligados a ofrecer las tres primeras opciones y la mujer embarazada decidirá si accede o no.
Unas medidas puestas en marcha por el Gobierno de la Junta, formado por el PP y Vox, donde uno de los puntos más importantes era “el fomento de la natalidad y el apoyo a las familias”, y que han sido anunciadas hoy por el vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, pese a que todas las medidas proceden de la Consejería de Sanidad. “Una agenda a favor de la vida y en defensa de la familia”, ha afirmado Gallardo, “unas medidas provida paras las mujeres embarazadas y para que los padres “puedan escuchar el latido del bebé antes de tomar cualquier decisión”. La intención es que se pongan en funcionamiento "lo antes posible", aunque es cierto que son muchos los centros hospitalarios públicos que no cuentan con los recursos suficientes para llevarlo a cabo.
Así, la primera de esas medidas será garantizar a la madre gestante el acceso a una atención psicosocial específica, en la esfera emocional, mediante el acceso a un psicólogo clínico de SACYL. Para ello se establecerá un procedimiento de derivación desde atención primaria a los equipos de salud mental para la atención preferente de las personas que lo requieran.
La segunda medida se centrará en la elaboración e implantación de un protocolo de latido fetal dentro de la atención programada en el primer trimestre.
El tercer punto que se promoverá será el acceso a la ecografía 4D a las mujeres gestantes durante el seguimiento de su embarazo, donde se podrá ver en tiempo real la cabeza del bebé, según ha anunciado el vicepresidente. En la actualidad, existe la posibilidad de realizar la denominada ecografía 4D, una técnica que permite la reconstrucción tridimensional de las imágenes habituales 2D del feto, al mismo tiempo que registra su movimiento, pudiendo así mostrar en un vídeo en tiempo real una imagen del bebé con sus rasgos y gestos faciales, manos, dedos, pies y resto del cuerpo, todas ellas perfectamente identificables y reconocibles para la madre y la familia, favoreciendo así su implicación emocional.
Si bien se trata de una técnica ecográfica complementaria y no sustitutiva de los estudios ecográficos estandarizados del seguimiento del embarazo, puede aportar ventajas para la evaluación ecográfica de los profesionales, ya que permite una mejor visualización del feto, así como una mejor valoración del corazón, permitiendo una detección más precoz de las cardiopatías congénitas.
Sin listas negras
Y la cuarta medida se centrará en velar por que se respete el ejercicio del derecho fundamental a la objeción de conciencia de aquellos profesionales que participen en la prestación de la interrupción voluntario del embarazo (IVE). “De esta manera vamos a evitar las listas negras de médicos que no quieren abortar”, ha asegurado.
García-Gallardo se ha mostrado orgulloso de estas medidas “a favor de la vida y de la familia”, y ha asegurado que “si estas medidas son útiles para que un niño que no iba a nacer lo haga, ya habrá merecido la pena”, para añadir que estas medidas se toman “para que los padres se sientan mucho más acompañados en el embarazo”.
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