La alianza UPA-COAG ha solicitado a la Junta de Castilla y León que levante la prohibición del uso ganadero de los pastos que se encuentran en terrenos afectados por los incendios de este verano en la Comunidad.
Asimismo, han reclamado la responsabilidad a la administración regional para "solucionar" los problemas que se deriven de haber sufrido incendios en las parcelas que utilizan normalmente como pasto para animales ya que creen que hay que tener en cuenta que las "zonas afectadas han empezado a rebrotar y han dejado de recibir apoyo de las administraciones para la alimentación animal".
Por otra parte, la alianza ha recordado que la Ley de Montes de Castilla y León establece que toda la superficie que no sea de cultivo y, por tanto, declarado como pasto, pasto con arbolado o arbustivo y otros que hayan sufrido un incendio, quedan prohibidos los aprovechamientos ganaderos durante los siguientes cinco años. Por ello, ha pedido a la Junta que "actúe y flexibilice esta norma".
Considera que esta norma es "absolutamente estricta y penalizadora" para los ganaderos que han sufrido incendios y que "genera efectos muy negativos" a los productores dado que comprueban cómo esas parcelas por el fuego "no son válidas para cubrir los derechos de Pago Básico a la hora de tramitar la PAC".
Desde UPA-COAG consideran que es un "auténtico despropósito" que se penalice "doblemente" a los ganadores ya que son "víctimas del incendio con la pérdida de pastos" y, por ende, de "alimento para su ganado". Además, "tampoco se les permite computar la superficie como susceptible de beneficios a efectos PAC".