Castilla y León nunca antes había sido tan desprestigiada por un Gobierno de la nación, si bien es cierto que hay diferentes regiones españolas que están muy abandonadas por parte de los distintos gobiernos estatales, el gobierno socialcomunista de Sánchez ha superado con creces esa barrera de desigualdad entre españoles, no sólo dándole menos fondos autonómicos, sino que también tildando a su gobierno regional elegido por las urnas de fascista por ser del PP y VOX, nada más y nada menos a la vez que pacta Sánchez y su ejecutivo radical con los enemigos de España, golpistas y filoetarras.
Resulta cuanto menos llamativo que un gobierno premie a quién se salta continuamente la Constitución Española de 1978 y desprestigie a las regiones que hacen lo posible por contribuir a una España mejor sin vulnerar la carta magna, o al menos no tantas veces como lo hacen aquellos que ni si quiera creen en las leyes y las libertades para todos los españoles.
Por ello, cuando algunos con luces iluminadas decimos que el Gobierno de Sánchez ha aumentando considerablemente las desigualdades entre españoles, nos referimos sin la menor duda a hechos tan sumamente destacables como los que he relatado en este artículo y que desde mi punto de vista merecen la crítica de la sociedad española. Pero es evidente que no únicamente debe servir para concienciarnos, también para actuar y frenar la destrucción de España tal y como la conocemos, el modelo de país y nuestro futuro está totalmente en juego. Sería un error desfallecer y no moverse ante tal atropello.