UPA ha trasladado al Ministerio de Agricultura la preocupación de la organización ante la nueva normativa que podría poner en peligro la viabilidad de las explotaciones de porcino. Se trata de una disposición final del Real Decreto 159/2023 sobre Bienestar Animal, que obliga a las granjas a ampliar sus instalaciones o reducir el número de animales.
En Castilla y León los datos del porcino son los siguientes: 4.000 explotaciones; 15.000 empleos directos e indirectos; 1.300 millones de euros anuales en valor de producción, y 4,5 millones de cabezas de ganado.
Una delegación de UPA, con Pedro Matarranz (responsable de porcino de UPA Castilla y León), reunida en los últimos días con Valentín Almansa, director general de Sanidad de la Producción Agroalimentaria y Bienestar Animal, ha trasladado el “peligro” que provocaría esta medida entre los ganaderos de porcino. La disposición afectará a todas las explotaciones a partir de marzo de 2025, y se está aplicando ya a los proyectos de nuevas granjas.
UPA ha trasladado al Ministerio que ante la dificultad o imposibilidad de ampliar las granjas, los ganaderos se verían obligados a reducir el número de animales presentes en las mismas, lo que reduciría fuertemente su rentabilidad y pondría en peligro su viabilidad.
El Ministerio de Agricultura ha reconocido ser consciente de los efectos de la reducción de animales en las granjas, y se ha mostrado abierto a incrementar la densidad si el sector presenta un plan con medidas relacionadas con el bienestar animal. Una de las claves podría ser la instalación de materiales manipulables, una especie de “juguetes” para los cerdos que evitarían posibles lesiones que en ocasiones se causan.
UPA va a trasladar sus propuestas a toda la rama productora porcina en la Interprofesional Interporc, para elaborar un plan conjunto y transmitirlo al Ministerio de Agricultura. El objetivo es “mantener la rentabilidad de las granjas de porcino, que tienen una enorme importancia para España”. No en vano, el porcino español es líder en Europa. Aporta el 39 % del valor de la Producción Final Ganadera y está formado por más de 85.000 granjas en toda España.