Uno de los grandes problemas a los que se enfrentan los jóvenes al terminar su carrera universitaria está relacionado con el encontrar su primer trabajo. Las empresas buscan personas muy formadas, pero también con mucha experiencia. La formación es viable, pero ¿cómo un trabajador va a contar con una amplia experiencia profesional si ninguna empresa le da la oportunidad?
Esta situación es, precisamente, la que está propiciando que cada vez haya más precariedad laboral, que la tasa de desempleo entre los jóvenes sea cada vez más alta, así como que los salarios sigan siendo bajos.
No obstante, a todos aquellos jóvenes a los que les queda cerca elegir la carrera universitaria que van a estudiar y que, por tanto, va a definir su futuro laboral, les interesará saber que hay determinados sectores y profesiones en las que apenas existe desempleo juvenil y en las que los becarios no se ven sometidos a situaciones precarias.
Según los datos del estudio 'Jóvenes universitarios y empleabilidad' del centro de estudios Randstad y la Universidad CEU San Pablo, una de las carreras universitarias con menos paro entre los jóvenes de 25 años es la de Ingeniería Informática, un grado que puede cursarse en Castilla y León, concretamente, en las universidades de Burgos, Salamanca, Valladolid y León.
La de Burgos ofrece el grado en las modalidades de online y presencial, y la de León únicamente en la modalidad presencial; mientras que la de Salamanca cuenta, además de con la carrera en su modalidad simple y con la de Ingeniería Informática en Sistemas de Información, con las dobles titulaciones de Ingeniería Informática y Administración y Dirección de Empresas, Ingeniería Informática y Estadística e Ingeniería Informática de Sistemas de Información e Información y Documentación.
Por su parte, la UVA en Valladolid ofrece Ingeniería Informática y el doble grado de Ingeniería Informática con Estadística; y en Segovia, el grado de Ingeniería Informática de Servicios y Aplicaciones, y el doble grado de Ingeniería Informática de Servicios y Aplicaciones y Matemáticas, el cual también se imparte en Valladolid.
Cabe destacar que la profesión de Ingeniería Informática permite trabajar como programador, gestor de proyectos, informático, analista programador, comercial de programas informáticos, técnico de ciberseguridad y asesor de programas informáticos, entre otros puestos.
Además, cuenta con varias ventajas. Presenta las tasas más altas de empleo, un 96,3% de los alumnos graduados consiguen trabajo al terminar los estudios; y hay poca oferta para mucha demanda dado que el proceso de digitalización acompaña al 100% de las empresas, lo que hace más sencillo el encontrar trabajo.
A todo ello se suma que, por lo general, el sector ofrece, en la mayoría de los casos, una estabilidad indefinida. Y, por si esto fuera poco, está muy bien remunerado.
Tanto es así, que, según datos recientes de la Universidad Francisco de Vitoria, el salario medio de un informático junior en España oscila entre los 25.000 y los 40.000 euros anuales. No obstante, con el paso de los años, según se va adquiriendo más experiencia y habilidades, los sueldos aumentan de manera considerable, lo que, en su conjunto, lo convierte en una profesión muy atractiva para los amantes de las nuevas tecnologías.