Los espectadores de Amar es para siempre se enfrentarán este viernes a un trepidante episodio marcado por un acontecimiento que cambiará la vida de Manolita. La protagonista de la serie de Antena 3 seguirá tratando de averiguar quién asesinó a su hija Marisol y, tras un desagradable encuentro, acabará en prisión sin recordar nada de lo sucedido.
Los peores temores de Marcelino se harán realidad y su mujer acabará metida en problemas por sus indagaciones en casa del coronel Beltrán. Manolita no está dispuesta a renunciar a encontrar al responsable del fallecimiento de su hija, que según el informe policial se debió a una sobredosis.
La investigación de la protagonista la llevará directamente hasta Carlos, hijo de Beltrán. Manolita ha intentado sin éxito hablar con él en dos ocasiones y, en el episodio que Antena 3 emite este viernes, tendrá por fin la oportunidad de preguntarle qué pasó la noche en que murió su hija.
Sin embargo, la versión de Carlos no convencerá a Manolita y la tensión estallará con la aparición de Beltrán, que inicia un forcejeo con la madre de los Gómez para defender a su hijo. Y es que Manolita está convencida de que Carlos es el asesino de su hija.
Finalmente, Beltrán llevará a cabo un macabro plan para acabar con las indagaciones de Manolita, que acabará en prisión acusada del intento de asesinato de Carlos, que sufrió un disparo en su casa tras el forcejeo entre su padre y la protagonista.
Así, Manolita se enfrentará desde la cárcel a un doble problema: además de intentar demostrar que el hijo de Beltrán es el asesino de su hija, tendrá que probar que fue el coronel y no ella el autor del disparo a Carlos.
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