Para ir a La isla de las tentaciones hay que estar preparado psicológicamente, pues la experiencia puede superar a muchos. Y prueba de ello es la pareja formada por la influencer Inma Campano y el opositor a guardia civil Ángel de los Santos, que solo unos días después del estreno de la segunda temporada ya han anunciado que se marchan.

Y es que en la primera hoguera de confrontación, Inma ya aseguró que es incapaz de seguir separada de su novio, con el que lleva un año. Ya anteriormente la vimos derrumbarse al ver a su chico pasárselo bien con las solteras del programa.

“Esperaba separarme de Ángel y estar bien. Pero me he separado y me he roto. Lo estoy pasando mal. No me imaginaba que iba a a ser tan duro”, aseguró la sevillana de 28 años entre lágrimas. “Me va a costar la salud, no me imaginaba que el separarme me iba a afectar tanto. Ahora mismo lo que más quiero en el mundo es ver a mi novio. No puedo, quiero verlo, quiero hablar con él, yo quiero una hoguera de confrontación, Sandra”, afirmó.

Por su parte, Ángel no se esperaba esa hoguera de confrontación. “No sé si está así porque ha visto cualquier gilipollez, por si me echa de menos, me tiene roto ya. No me gusta verla así y no quiero que sufra. No le he dado motivos para que tenga que perdonarme nada”, decía entre lágrimas.

En su primer encuentro ambos se abrazaron y lloraron. Ella le confesó que no podía estar sin verle y que la experiencia le estaba afectando mucho. A continuación, a instancias de la presentadora, le confesó a su pareja que no le gustaba su contacto con Lía, de la que había visto un vídeo susurrándole algo al oído. Él se defendía que era un juego de 'Verdad o reto' que había en la casa. "No he jugado, pensé que era una tontería. Yo lo que quiero es irme a casa. Quiero estar en casa con ella” se defendía él.

“Sabía que podíamos separarnos e intentar probar esto a ver si se me quitan los celos. Me da igual lo que hable la gente, me importas tú y esto me ha enseñado a ser menos celosa. Me va a costar la salud” decía Inma, pidiendo a su chico abandonar el programa. “Me gustaría que tuviéramos un hijo juntos y que nos casáramos” añadía después.

Ante tal propuesta, Ángel aceptó salir de La isla de las tentaciones encantado. “Vamos a tener un hijo y nos vamos a casar. Estaba seguro de que nos íbamos a ir juntos y estaba seguro de que era la mujer de mi vida” aseguraba él.

Melodie, en la hoguera

Melodie da por terminada su relación con Cristian

Del resto de parejas, destaca cómo Melyssa asaltó Villa Montaña, en un descuido de sus compañeros y del equipo, para recriminar a Tom, su pareja. “¡Tom Brusse! ¡Eres un desgraciado! He visto todo que lo sepas. Nunca más me vas a ver en tu vida. Eres un desgraciado. He visto cómo te lamían el cuello. He visto cómo te tirabas encima de Sandra. Y me da igual porque eres un desgraciado de mierda”, decía fuera de sí al llegar a la casa, sin hacer caso al resto de participantes, que le decían que su acercamiento a Sandra era parte de un juego.

Marta, por su parte, se tomó muy mal la cita de Lester con Andrea, exparticipante de la primera edición. “Estamos aquí porque él me ha engañado mil veces, no estamos aquí por mí, estamos aquí por él. Que se lo pase bien, que yo también me lo voy a pasar bien” decía la concursante de Gran Hermano a Sandra Barneda, la presentadora.

Por último, destaca que Melodie da por rota su relación con Cristian, después de verle bailando junto a las tentadoras. “En nueve años de relación nunca he bailado agarrada con él. Igual ahora se siente liberado, no sé”, comentaba.

Pero Barneda le decía que había más imágenes, y se escuchaba a Cristian decir que él ha ido al programa “para separarme, no para reforzar nada”. “No lo conozco, no sé qué decirte, no sé quién es esa persona. Doy por terminada mi relación, yo ya no tengo pareja aquí”.