Las distintas polémicas que se han ido sucediendo durante esta temporada con algunos de los concursante habían levantado una gran expectación alrededor de la repesca, que suponía el regreso de Saray a las cocinas, junto al Sito, Adrienne, Mónica, Rosa, Fidel y Sonsoles. Sin embargo, ocurrió algo inédito en la historia del programa.
Por primera vez ningún ex concursante fue repescado. Y es que, tal y como explicó Jordi Cruz, "ninguno de los siete habéis estado a la altura que exigimos. Llevamos ocho años, y no vamos a permitir que entre nadie a nuestras cocinas solo porque fue el menos malo. No regalamos delantales blancos”.
Pero, sin duda, uno de los momentos más comentados de la noche fueron las lágrimas de Saray al volver al programa y reencontrarse con sus compañeros. "Me siento súpermal... Me ha dado mucha alegría ver a mis compañeros. La forma en la que me fui de aquí. Me arrepiento tanto de haber sido tan tonta. Me dio una embolia mental. Me gustaría que me dierais una oportunidad", explicó la cordobesa visiblemente arrepentida.
Sin embargo, hay que recordar que esta repesca lleva meses grabadas y que las declaraciones que la concursante ha hecho durante las últimas semanas son después de estas palabras de arrepentimiento. La propia concursante acudía a Twitter para retractarse y desdecirse de estas palabras: "Fui muy tonta al llorar de emoción al ver a mis compañeros y cuando ya he visto todo fuera me he dado cuenta de que no me podía ver ninguno".
A pesar de que no hubo un repescado de los ex participantes, el programa quiso dar una oportunidad a 5 de los candidatos que se quedaron fuera en la gala 1. En este caso sí hubo un vencedor, Carlos, que se incorporará a las cocinas a partir de la próxima semana.
Finalmente, el programa eliminaba a Sara Lúa tras una caótica prueba de eliminación. Una sorprendente expulsión que emocionó al resto de concursantes, incluido a Iván. “Bueno, no me gusta ver esto, parece ser que soy un Gallo que llora", dijo el concursante.