El pasado lunes, con la intención de competir con el estreno de Pasapalabra en Antena 3, Sálvame se inventó una sección en la Kiko Hernández destapaba algunos de los escándalos, aún desconocidos, más polémicos de los últimos años.
Así, durante toda la semana han ido destapando supuestos secretos en el programa, hasta ahora ocultos: fotografías de un hombre famoso siendo desleal a su mujer, una secuencia comprometida de un miembro de la familia del Rey, el polígrafo secreto a Lydia Lozano para saber qué ocurrió realmente con el caso de Ylenia Carrisi…
Tras marear a los espectadores con supuestas exclusivas, que sólo mencionaron, pero no mostraron, este jueves se ha desvelado una verdadera bomba que ha terminado explotando en contra del propio programa.
"Febrero de 2016. Un personaje muy conocido acude a Sálvame Deluxe para someterse al test de inteligencia. Antes de hacerse público el dato, el famoso o famosa en cuestión se entera del resultado y rompe a llorar. Es entonces cuando pide y suplica a la dirección del programa que se maquille públicamente el dato de cociente intelectual, ya que era extremadamente bajo, muy por debajo de la media", leía Carlota Corredera, ya que fue la encargada de abrir el sobre que contenía el secreto.
De manera inmediata, todos los colaboradores empezaron a reflexionar sobre cual podría ser la identidad de esa persona pública. Sin embargo, con la sola intención de mantener entretenido a los espectadores, Sálvame dejó al descubierto su engaño al haber falseado los datos del test de inteligencia.
Finalmente, se reveló que el protagonista al que se referían era el pequeño Nicolás. En su momento, el espacio de Telecinco señaló que tenía un 98 de cociente intelectual, por debajo de la media de 100. Sin embargo, el resultado real de Nicolás habría sido de un 70, veinte puntos menos de lo que se dijo.