En los últimos años es más fácil encontrar titulares negativos sobre TVE que positivos. En medio de todo ese desierto, el año pasado surgió un oasis llamado El ministerio del tiempo. Aunque no arrasó en términos de audiencia en la televisión lineal, la serie logró ganarse el favor de aquellos espectadores que ven televisión cómo y cuando quieren.
La ficción de TVE creada por Javier y Pablo Olivares supuso el relanzamiento de la cadena. La televisión pública volvía a llamar la atención de los jóvenes y El ministerio del tiempo se convertía en un fenómeno nunca antes visto en España con una ficción nacional. Algo a lo que sí nos tienen acostumbradas algunas series americanas como Perdidos, Expediente X o Fringe.
Este miércoles, TVE ha hecho oficial la fecha de estreno de su segunda temporada. Será el próximo lunes 15 de febrero. Para hablar de esta serie y de todos los formatos de ficción con el sello de TVE hemos hablado con Fernando López Puig, director de ficción de RTVE. Él habla de los próximos estrenos de la casa, como El caso o La sonata del silencio y del posible regreso de Los misterios de Laura.
Es un gustazo para vosotros presentar algo como ‘El ministerio del tiempo’ con tan buena prensa…
Es una serie distinta. Es una serie que tiene una idea muy impactante que te atrapa y que decidimos hacer. Parece que contraviene un poco las normas de lo que debería ser una televisión generalista. El riesgo estaba ahí y salimos adelante. El resultado de la primera temporada fue muy bueno. No fue una audiencia maravillosa y espectacular en directo, pero sí hubo después una audiencia cualitativa y de calidad que empujó a una cadena que necesitaba rejuvenecerse y cambiar su perfil. Esa es la inversión de la serie. Creemos que El ministerio del tiempo es muy interesante para la cadena.
¿Es una serie que sólo se podría hacer en TVE?
Efectivamente. TVE está en un punto medio de una cadena privada que depende de la publicidad y una cadena de pago. TVE se mueve en ese terreno y el objetivo final es el espectador, no el abonado o el publicista. Ese movimiento nos permite ciertos lujos que a lo mejor las cadenas privadas no pueden tener porque tienen que responder a unos baremos de audiencia.
¿Permite la buena imagen de esta serie no exigirle tanto en términos de audiencia?
Siempre lo hemos comentado. Para una cadena privada los datos hubiesen sido críticos para una continuidad. Es verdad que nos planteamos que la respuesta de la audiencia aportaba una serie de valores y cualidades a la cadena, modernizándola. Ponía la cadena al nivel de los jóvenes de la calle, y eso nos aportaba mucho más que a lo mejor haber tenido tres puntos más de audiencia.
¿Os vais a lanzar más a la piscina en futuros proyectos viendo la imagen positiva que os da este tipo de proyectos?
Hay que contrapesar. Somos una televisión pública y emitimos para todos los españoles que depende de los presupuestos del Estado. Hay que compensar. El ministerio del tiempo es un producto para todos los públicos, otra cosa es que sea más o menos críptico o que tenga unos elementos que sean más difíciles para ciertos espectadores. Tenemos que dar ese tipo de series más generalistas. Apostamos por la calidad. No creo que un género de serie te de más calidad, te da matices y perfiles. Ahora mismo estamos con La sonata del silencio que es un melodrama llevado a límites absolutamente maravillosos. Va a ser otro paso junto a El caso.
Arranca un nuevo año. ¿Qué podemos esperar de TVE esta temporada?
Tenemos cerca El caso y a punto de terminar El hombre de tu vida, una comedia romántica con José Mota. Olmos y Robles está pendiente de renovación y estamos trabajando para que tenga una segunda temporada. También tenemos la vuelta de Víctor Ros, que era muy importante para nosotros el regreso del crimen de detectives. La sonata del silencio es una serie cerrada de nueve capítulos con la que estamos muy ilusionados porque está siendo espectacular.
¿Hay proyectos para la próxima temporada?
En principio tenemos proyectos en desarrollo y dependiendo de cómo avancen darán el paso a la producción. Pero sí, estamos ya cerrando el último trimestre y queremos tener algún proyecto nuevo.
¿Qué balance hacéis de ‘Carlos Rey Emperador’ al ver que no ha podido mantener el nivel de ‘Isabel’?
Personalmente, creo que Carlos es una grandísima serie. Exigía un esfuerzo mayor porque es una historia más complicada. Tenía además el referente de Isabel y el listón era altísimo. Las comparaciones son odiosas y al final se hacen. La popularidad que alcanzó Isabel no la ha alcanzado Carlos. Pero creo que es una serie que teníamos que hacer y la hemos emitido con toda la seguridad de que es un producto de pública. El espectador tenía que estar muy atento a las tramas y eso les ha penalizado. La calidad era soberbia en cuento a la fotografía, la imagen o el vestuario. El casting ha sido espectacular. Entre la trilogía de Isabel y Carlos hemos agotado a los actores. Es un estupendo producto aunque la audiencia no haya cuajado como queríamos.
¿Sigue habiendo planes para hacer una serie sobre Felipe II o al ver los resultados de audiencia es un proyecto aparcado?
Ahora mismo estamos desarrollando una biblia de Felipe pero estamos a la expectativa de la dirección.
‘Cuéntame’ ya va por su temporada 17. ¿Qué planes hay para la serie? ¿Si la audiencia se mantiene la serie se mantiene?
Ha arrancado muy bien esta temporada, con una familia más unida luchando por la bodega. Hemos vuelto a ser más clásicos reuniendo a la familia. Veremos cómo avanza el desarrollo de la serie y si todo continúa como hasta ahora habrá una temporada 18 sin duda.
¿No hay planes para ponerle fin?
Para nada. Cuéntame es una serie que parece muy joven, o mucho más joven que las series de repente estreno. Cada año se renueva y lucha por estar ahí con sus tramas y sus personajes. Depende de sí misma. Es una serie muy familiar.
¿Cómo os habéis tomado en TVE la auditoría interna que hay sobre las cuentas de ‘Cuéntame’?
Estamos dando todos los datos posibles. Surgió a raíz de la salida de Pilar Punzano. Lo que estamos haciendo es reafirmar de forma oficial lo que ya todos los años se va auditando. Todos los años se hace una auditoría de cada programa para saber que cada presupuesto se ha invertido bien. Lo que estamos haciendo este año es darle un segundo repaso oficial de cara al Consejo de Administración.
¿No tenéis miedo de que salga algo que no cuadre?
En absoluto.
‘Los misterios de Laura’: hay muchas voces que piden su regreso y no cuadra en muchas cabezas que TVE se haga con los derechos de la americana pero no renueva la española.
Tenemos un problema presupuestario y nos gustaría contar con más presupuesto para ficción. Tenemos que ser muy exclusivos en eso y tenemos pocas balas. A mí me encantaría que volviera. De hecho, tenemos un proyecto para presentar que, aunque no vuelva como una temporada de 13 capítulos, volviese con especiales como lo que han hecho con Sherlock este año. Intentar hacer un especial en periodo navideño. Es una manera de no perder el personaje porque me parece uno de los grandes hallazgos de los últimos años.
‘La República’, la serie que os persigue siempre. ¿Por qué no la hemos visto?
La República habrá que emitirla en algún momento, evidentemente. No soy yo el que decide esa emisión.
¿Por qué no se ha emitido?
Ahora tendríamos que emitir toda la primera temporada porque hay que refrescar. Además, la segunda temporada comienza en el segundo después de la primera temporada. Es uno de los grandes melodramas que se han hecho en ficción en este país y espero que algún día la podamos emitir. Y que no tardemos demasiado porque las series caducan.
¿No ha caducado ya?
De hecho, hay personajes que ya han fallecido. Va a ser una serie casi homenaje.
¿Por qué se ha llegado a este punto?
La crisis decidió lo que se podía emitir y lo que no. La situación política y de la monarquía influyó. Ahora lo que se está planteando es cómo emitirla y de qué manera.
¿Por qué se ha elegido ‘Víctor Ros’ como la serie que debe tener una segunda oportunidad?
Víctor Ros es una serie que dejó con ganas de más. Hicimos seis capítulos y se planteó en un principio que pudiera continuar. Por temas presupuestarios hubo que aparcarla. Hubo en tiempo en el que pasaba mucho tiempo entre que producíamos y emitíamos, y eso ha propiciado que las producciones se perjudicaran, tanto en emisión como en volverlas a poner en marcha. Al final hemos decidido volviera Víctor Ros en primer lugar porque era una de las series que teníamos pendiente y más adelante intentaremos que retornen otras series.
¿No crees que TVE se pone piedras en su propio camino en temas de programación o permitiendo que ‘Carlos’ saliese antes de DVD que en emisión?
Eso es algo que comenté con comercial porque al principio me chocó, pero parece ser que no perjudica un soporte al otro. Esa es la explicación que me dieron.
No sois muy dados a mover la emisión de vuestros programas para darles una segunda oportunidad…
El dilema en TVE es hasta qué punto te puedes comportar como una privada. Muchas veces, cada vez que estrenamos algo, alguna cadena viene a pisarnos. Olmos y Robles dio muy buenos resultados pero rápidamente vinieron en masa a competir. Podríamos haberla cambiado de día, pero una televisión pública debe respetar al espectador. Son posturas que al final van con la base de la cadena.
Justo con el inicio de la anterior legislatura hubo un parón en el estreno de ficciones por la bajada presupuestaria y el descabezamiento de RTVE. ¿Tenéis miedo a que la actual situación política os vuelva a colocar en la misma situación?
Aquello nos pilló porque teníamos muchas series que sabíamos que íbamos a emitir tarde o temprano. Había una bolsa de series. Los misterios de Laura fue una víctima de ese retraso y Gran Reserva penalizó muchísimo. Lo que estamos haciendo ahora es pegar mucho la producción a la emisión para que en el caso de que haya un parón no haya nada que se nos quede en la nevera y no puedas sacarlo. Que todo lo que tengas en marcha vayas a emitirlo o estés a punto de emitirlo. Ese miedo siempre está pero creo que estamos en una situación mejor que hace cuatro años al haber cambiado ese plan de producción.