Australia ya tiene representante para el Festival de Eurovisión de 2020, que se celebrará el próximo mes de mayo en Róterdam. Como el año anterior, la televisión pública australiana, la SBS, hizo una selección interna de diez temas que competirían para viajar hasta los países bajos, y a través de una gala, un jurado profesional y el público elegirían al elegido.
Así, Montaigne con el tema 'Don’t break me' resultó la propuesta elegida, después de logar un total de 107 puntos; por detrás quedó Casey Donovan, con 100.
El Festival de Eurovision es muy conocido en Australia, programa de televisión que alcanza grandes datos de audiencia en aquel país, a pesar de que se emite en la madrugada. Por eso, ya en 2014, la Unión Europea de Radiodifusión ya le permitió actuar en Copenhague en el intermedio de una de sus semifinales, pero sin poder optar al premio final. Y así pudimos ver a Jessica Mauboy defender Down Under.
Aquella actuación dejó tan buen sabor de boca que un año después, con motivo de la 60 edición del festival y tras las numerosas peticiones de la SBS, la la UER decidió invitarles a participar como un hecho extraordinario, pasando directamente a la final. Al año siguiente, comenzó a participar como país de pleno derecho, pasando por las semifinales al igual que cualquier país que no pertenezca al top5.