En 2015, la cadena británica ITV resucitó Love Island, un reality de citas (emitido originalmente una década antes) en el que un grupo de chicos y chicas de buen ver se encierran en una casa de Mallorca para encontrar a su media naranja, con las cámaras, por su puesto, de testigo.
El formato se ha convertido en un auténtico fenómeno mundial. En 2018 ganó un Premio BAFTA TV al mejor reality, y ya tiene franquicias en Australia, Finlandia, Alemania, Polonia y Suecia. Entró en Estados Unidos de la mano de la CBS, y en Francia lo hará de la de Amazon Prime Video. Love Island se ha colado entre los temas televisivos más comentados en Twitter durante el presente 2019, y esto nos hace preguntarnos: ¿llegará algún día a España, donde los realitys funcionan a las mil maravillas, y más teniendo en cuenta de que se graba aquí?
La mecánica de ‘Love Island’
En el programa nos encontramos entre una y dos decenas de participantes (depende de la edición) que se emparejan inicialmente en una ceremonia de selección antes de competir juntas en una variedad de juegos y desafíos. Mientras está bajo vigilancia de cámara las 24 horas,del día, el objetivo es seguir siendo parte de una pareja sentimental a medida que nuevos concursantes se infiltran en la villa, tentando a los solteros lejos de sus compañeros originales. Quien no encuentre pareja será expulsado. La pareja ganadora se llevará un premio económico en efectivo, y a lo largo del concurso pueden cambiar de compañero o permanecer con la que ya tienen.
Las relaciones sexoafectivas marcan el programa, en el que como decimos permanecer en soltería supone la expulsión. A partir de 2018 se establecieron reglas como la prohibición de la masturbación, de la desnudez total y restricciones a la hora de mantener relaciones sexuales con alguien que está ebrio. Los concursantes pueden beber tanto alcohol como quieran, pero desde el programa aseguran tener un control del mismo.
El programa hace controles de ETS a los concursantes y les proporciona preservativos
Tanta importancia tiene el sexo que el programa tiene su propia marca de preservativos y pone a disposición de los participantes cerca de 200 para las seis u ocho semanas que dura la grabación. Además, antes de entrar en la villa mallorquina, hay que hacerse un control de enfermedades de transmisión sexual.
Los isleños están aislados del mundo exterior, pero solo en parte. Disponen de un teléfono móvil para contactar con la producción en cualquier momento, y con el mismo también podrán tomar fotografías sobre su estancia.
El programa cuenta con una presentadora y también con locuciones en off. En estos días se ha conocido que la sexta edición de Reino Unido estará presentada por Laura Whitmore, sustiuyendo a Caroline Flack, quien ha sido arrestada por atacar a su novio, el tenista Lewis Burton, después de tener una discusión, que acabó con el deportista en el hospital.
¿Llegaría a España de la mano de Antena 3?
Es cuestión de tiempo de que España adapte este reality a su televisión, y más teniendo en cuenta de que la casa en la que se graba con unas 70 cámaras está ubicada en Mallorca. Los derechos del formato pertenecen a ITV, que acaba de cerrar un acuerdo con Antena 3 para volver a emitir Pasapalabra.
De momento se desconoce si este acuerdo abre la puerta a que Atresmedia e ITV colaboren más estrechamente en la producción de otros formatos, como pudiera ser el caso de Love Island; no hay que olvidar que la británica lleva meses preparando su desembarco en nuestro país y las negociaciones que ha mantenido con Mediaset hablaban de un acuerdo global para producir nuevos formatos.
En el hipotético caso de que Antena 3 se hiciese con Love Island, podría suponer una bocanada de aire fresco a la cadena, que no suele ofrecer programas en directo, a excepción de los magacines e informativos. Esta isla del amor ayudaría a quitarse la etiqueta de cadena triste (que Mediaset está volviendo a utilizar de forma un tanto agresiva) y a abrirse a formas de entretenimiento que hace tiempo que desterró de su parrilla. Lo cierto es que en Antena 3 ha tenido numerosos realities a lo largo de sus tres décadas de vida, aunque muchos de ellos fracasaron estrepitosamente y fueron cancelados a las pocas emisiones: La vuelta al mundo en directo, El Marco, El Barco, 4. Unan1mous, Estudio de actores… De esta forma, podrían demostrar que Telecinco no es la única cadena que puede hacer buenos realities, y abriese la veda a otros formatos un poco más atrevidos y dinámicos.