A Antonio David Flores no se le da bien competir con otros famosos. Hace una semana la audiencia le expulsaba de la casa de Gran Hermano VIP, y este viernes, se quedaba con los miel en los labios, y nunca mejor dicho, en la final de la décima edición de Ven a cenar conmigo: Gourmet Edition, en la que quedó en segundo lugar tras Pablo Carbonell.
Antonio y Pablo compartían mesa y concurso con Lucía Bosé y Cósima Ramírez, que ejerció de anfitriona de la última cena. Su menú estuvo compuesto por un entrante titulado ‘Sinvergonzonería italiana’, con tocino italiano derretido en una tostada y una ensalada con mango y manzana; como plato principal servirá una ‘Sinvergonzonería ibérica’, carrillera de cerdo ibérico con puré de patatas; y de postre preparará una ‘Sinvergonzonería dulce’, un sorbete de limón al cava elaborado con su robot de cocina.
Su comida fue buena, y ejerció como una gran anfitriona, pues en el fin de fiesta puso a sus invitados a desfilar con algunos de sus diseños. Pablo llevó un modelo de Nubes, Lucía se convirtió en "la Virgen de las Bolas", Antonio David hasta se pintó los labios; sin embargo, a los invitados todo esto les pareció insifuciente.
Como broche, la anfitriona desveló el orden en el que habían quedado los participantes: Lucía cuarta, ella misma, tercera, Antonio David segundo y Pablo Carbonell, ganador del programa, con sus correspondientes 3.000 euros de premio (y eso que Antonio David le quitó dos puntos, utilizando uno de sus poderes).