El cuarto programa de MasterChef Celebrity comenzó con Marta Torné y Tamara Falcó como las mejores cocineras, en una primera prueba que consistía en replicar postres por parejas. Un concursante vería el producto final y conocería la receta, y tendría que ir contándosela a su compañero a través de un muro.
Ambas aspirantes se convirtieron en capitanas en la prueba por equipos, en las que había que dar de comer a un equipo de bomberos, pero el papel les vino grande a las dos. Tamara Falcó no sabía proyectar la voz para preguntar cómo iban las elaboraciones y dar órdenes, y Marta Torné llegó a sufrir un pequeño ataque de nervios que le nubló la vista por un momento. “Es la ansiedad” decía Elena, mientras Marta era atendida.
Félix se salva a sí mismo.
Marta Torné, Elena Furiase, Ana Milá, Vicky Martín Berrocal, Almudena Cid y Félix Gómez resultaron el equipo perdedor, y volvieron a pelear por permanecer en el programa. Sin embargo, como Félix tuvo un buen desempeño en la prueba grupal pudo salvar a dos compañeros, y eligió salvarse a sí mismo y a Almudena.
Ahí no quedaba la cosa. Debido a “el bajo nivel de los aspirantes”, los jueces decidieron que dos celebridades de ediciones anteriores, Boris Izaguirre y Anabel Alonso, volviesen a la competición. Ambos cocinaron en la prueba de eliminación con el delantal negro, y con sus platos lograron convencer a Samantha Vallejo-Nágera, Jordi Cruz y Pepe Rodríguez, logrando así concursar a partir de la semana siguiente en pleno derecho. No tuvieron la misma suerte Marta Torné y Elena Furiase, que resultaron las expulsadas de la entrega.