Desde hace tiempo se critica en redes cómo algunos influencers aprovechan sus vacaciones en lugares donde hay pobreza para promocionar las marcas para las que trabajan. En marzo de 2018, Dulceida fue blanco de muchos comentarios por regalar unas gafas de sol a niños de una tribu africana. Sin embargo, a otros aquella lección sobre cómo gestionar las redes sociales cayó en saco roto.
Y es que ahora Anabel Pantoja ha actuado de manera similar a Dulceida en un viaje a Cuba. En la zona de La Habana Vieja, Anabel se paró a hablar con dos niñas, y subió la conversación a los stories de su Instagram.
“Toma, unas gafas de sol, ¿te las pones?” le decía a una niña, que no le seguía mucho el juego pero acababa aceptando el regalo. “¿Cómo te llamas?” preguntaba a la chiquilla. “¿Te las pones, Jéssica, para que te veamos?” insitía Anabel, en una publicación en la que se mencionaba la marca. La niña no mostraba demasiado entusiasmo en el regalo, pero Anabel insistía. “¡Para cuando salgas por ahí!”.
Además, la “generosidad” promocional de Anabel no quedaba ahí y regalaba una barra de labios a otra niña. “La hermana de Jéssica estará guapísima con su labial” escribía Anabel, mecionando a otra marca de cosméticos.
Al igual que le ocurrió a Dulceida, muchas voces se han elevado en contra de la sobrina de Isabel Pantoja, que se momento no se ha pronunciado al respecto. Ese tipo de comportamiento no solo servirá para que sus compañeros de Sálvame critiquen lo ocurrido, sino que incluso podría poner en peligro futuras colaboraciones de Anabel con las marcas, al no hacer las promociones de una forma que favorezca al anunciante.
Más tarde, Anabel borró los vídeos “porque son menores”, según explicó, y pidió perdón. “Por supuesto que no quería publicitar con menores, quería sacarles una sonrisa, nada más”, explicó en otro vídeo.
En ese sentido, quiso aclarar que “no estoy publicitando la marca de gafas” pues diversas marcas les habría dado gafas y otros artículos para “cederlos” y que “no quería dañar la moral de cada ser humano que me está criticando”. Pese a pedir perdón, afirmó que lo ha hecho “con muchísimo gusto, darle una ilusión a esos niños” e insistía que “son marcas que son amigos míos” y que “seguiré haciendo lo que me dé la gana”.