Anoche, Supervivientes emitía imágenes muy duras en las que se veían a Violeta y Dakota discutir con Carlos Lozano, que tiene ahora el papel de Pirata Olvidado que puede robar a sus compañeros de la playa Cabeza de León.
El que fuese presentador de Operación Triunfo amenazaba con robarles el machete, y Violeta lo impidió, lo que sirvió para desencadenar una guerra que se fue a lo personal. Carlos llamó a Violeta “señora poseída por el demonio” y “bipolar”, y ella por su parte, gritaba a los cuatro vientos que “esto no es un geriátrico, no tenemos por qué aguantar a viejos desquiciados”, que “ojalá algún día se tenga que comer su asquerosa lengua de jubilado”, y que le daría vergüenza que su padre fuese “tan ridículo por tener un minuto en televisión”. “Si yo tuviera una hija como tú no la miraría ni a la cara” le respondía Carlos, que tachaba a los concursantes de “parásitos”.
“Tú sí que eres un parásito social, que no te quiere ni tu madre” saltaba entonces Dakota. Carlos se escudaba en su currículo, diciendo que“qué más quisieras tú tener la carrera que he tenido yo” mientras Violeta decía que grandes presentadores eran “Jorge Javier, Carlos Sobera, Jordi González, te dan mil vueltas”. Además, la de Mujeres y Hombres y Viceversa incitaba a todos sus compañeros a hacer sus necesidades bajo la cabaña en la que tiene que estar Carlos Lozano, alegando que es en ese lugar donde tiene que ir la basura.
“¡Calvo, 'implantao'!" "¡Gorda!"
La guerra continuó con Dakota llamando viejo verde a Carlos, que le respondió que eso lo sería su padre. “A mi padre no lo mientes, comemierda.Te da 40.000 vueltas, que tienes una rotonda aquí (en la cabeza), calvo, calvo, te vamos a llevar a Svenson, que eres un implantao”. Como los insultos se iban al terreno del físico, Carlos respondió “Y tú la grasa que tienes en tu culo, gorda”. Violeta, entonces amenazaba a Carlos con usar “sus injertos de pelo como cebo”.
Tras hacer un repaso al físico y a la familia, tocaba a las parejas. “Esa Míriam, que te puso tos los cuernos, una máquina” gritaba Dakota, en relación a Míriam Saavedra. “Ese Rubén, que se estará tirando a otras, porque con una persona como tú yo me acostaría con 100.000, que das asco. El bigote, a ver si te lo depilas, y las cejas, que pareces un mono”.
Jordi recuerda que se han saltado las normas
En una conexión en directo, Jordi González preguntó a Carlos Lozano si le parecía normal, y el superviviente respondía que no, que era “muy feo” y que no tenía que entrar “en el juego de unos niñatos”, pero que “quien se pone chulo conmigo, lo paga”.
González aprovechó para recordarle que, por su condición, el Pirata Olvidado, “solo puede hablar al aire, emitir ruidos y hacer gestos, pero no puede hablar directamente con nadie”. “Bueno, pues que me sancionen” asumía Carlos Lozano.
Jordi González apuntó que “no vamos a tomar ninguna medida” porque “entendemos que envuestra batalla hayáis hablado directamente” pero pidió que se hable “a los dioses, a las estrellas, a los pájaros”, pero no a los habitantes de Cabeza de León, a los cuales recordaría que no se puede hablar.
Dakota y Carlos Lozano sellan la paz
Pese a que el programa emitió una de las grandes broncas de la edición, al final, Dakota y Lozano sellaron la paz: Lozano devolvió lo que había robado, y ella le pidió perdón por llamarle “viejo verde”. Violeta, sin embargo, no hizo las paces. “Antes nos llevábamos muy bien pero es más falsa que Judas” dijo Carlos sobre la joven.