Cuando hace ya casi una década, Telecinco se planteó comprar Cuatro o laSexta, el consejero delegado de la cadena, Paolo Vasile, confesaba que “descartamos la opción de laSexta porque era imposible entenderse con ellos. laSexta ha elegido su camino, y nosotros con Cuatro, otro diferente”.
Dos caminos que cada vez son más distintos a tenor de lo sucedido en la última semana y que demuestra que las estrategias seguida por Mediaset España y Atresmedia con ambas cadenas han dado distintos frutos.
laSexta logró el minuto de oro de las Elecciones del 28-A con 5 millones
En el caso de Atresmedia se decidió fomentar el ADN informativo de laSexta. Era una estrategia arriesgada, a largo plazo, para la que se requería mucha paciencia. Pero, conscientes de los cambios políticos a los que se enfrentaba el país, en el grupo apostaron fuerte por ello.
Los primeros años no fueron fáciles. De hecho sólo hay que ver los datos de la cadena en los debates electorales de 2008 (5,3% y 6%), siempre por detrás de Cuatro; o en las Elecciones Generales de 2011 (2,7% y 523.000 espectadores), para darse cuenta que el camino no ha sido sencillo.
Sin embargo, poco a poco laSexta fue construyendo una identidad. Si algo pasa en el país, ahí está la cadena para contarlo. Y año a año, acontecimiento a acontecimiento, cita electoral a cita electoral, la cadena verde consiguió convertirse en referencia informativa.
Así, el pasado domingo reventaba los audímetros durante la cobertura de las Elecciones Generales con un impresionante 20,7% de share y 4.044.000 espectadores y logrando el minuto de oro a las 22:43 horas con 5.000.000 espectadores.
Una imagen paradigmática
En el lado opuesto se encontraba precisamente Cuatro, que de ser la segunda opción en los debates en 2008 antes de su fusión con Telecinco, ha pasado a emitir en simulcast el especial elecciones de la principal cadena de Mediaset España. El dato, obviamente, fue catastrófico: un 3,4% de cuota y 640.000 espectadores.
La imagen, además, resultó bastante paradigmática ya que en la mesa se sentaba como un simple tertuliano más, y no como primer espada, Javier Ruiz, quien en pocos meses ha visto cómo le cancelaban Las mañanas de Cuatro y Noticias Cuatro y la audiencia del canal ha caído en picado.
Pero, además, sólo dos días después, otra evidencia de los diferentes caminos que tomaron Mediaset España y Atresmedia después de comprar Cuatro y laSexta: el martes, bajo el eufemismo de transversal, Cuatro se telecinqueaba un poco más acogiendo en su parrilla Tierra de nadie, el debate de Supervivientes.
Como era de esperar, el dato fue espectacular y la segunda cadena de Mediaset España se disparaba hasta un 8% de cuota de pantalla en el día después de que dicho debate se convirtiera en el programa de producción propia más visto de la historia de la cadena.
A partir de ahora parece que ese será el destino de Cuatro: perder cualquier atisbo de aquella esencia con la que nació hace ya más de catorce años y convertirse en una especie de Telecinco 2. Parece que ha sido la única solución posible a una estrategia cortoplacista y, en ocasiones, alocada. ¿Funcionará? ¿Gustará igual a aquellos anunciantes que hace unos años eligieron al antiguo canal de Sogecable como la cadena con mejor perfil comercial?
Durante el mes de abril, Telecinco arrasó con un 14,1% de cuota de pantalla, 2,4 puntos más que Antena 3 (11,7%). Sin embargo, la suma de Telecinco y Cuatro (14,1% + 5,1%) fue la misma que la de Antena 3 y laSexta (11,7% + 7,5%), un 19,2%. Una muestra más de las diferentes estrategias que han tomado en ambos grupos.