Este jueves Sofía Suescun abandonaba como expulsada la casa de GH DÚO por segunda vez, y esta vez, para siempre. Y es que los cinco compañeros que han permanecido en Guadalix, Juan Miguel, María Jesús Ruiz, Kiko Rivera, Irene Rosales, y Alejandro Albalá se convirtieron en los finalistas de esta peculiar edición de Gran Hermano por parejas, que volvió a liderar la noche en su gala número 13.
Sin embargo, el programa decidía hacerles creer a los concursantes que todavía debían hacer frente a una nueva nominación, y que para ver quién se convertía en líder debían ganar una prueba de cultura general. Una prueba con castigo, pues fallar las preguntas suponía acabar pringado con un producto que Irene identificó como puré de patatas.
Como era de esperar, los errores fueron sonados. Irene no supo que Ulán Bator es la capital de Mongolia, Kiko no respondió equilátero cuando le preguntaron qué triángulo tiene los tres lados iguales, y Juan Miguel creía que era el propio Jesucristo quien pintó el cuadro ‘La última cena’.
Más sonado fue el error que tuvo Kiko Rivera sobre su padre, pues cuando Jordi González preguntó “¿Quién fue el número 1 del escalafón taurino en el año 1972?”, dijo “Ordóñez”, mientras Irene le señalaba el error. Al saber que la respuesta correcta era Paquirri, el DJ espetó “ole mi padre”.
Sofía pierde el trono de reina de los realities (de nuevo)
Según explicó Jordi González, los porcentajes para la última expulsión del concurso han ido variando a lo largo de la semana, pero finalmente fue Sofía Suescun quien abandonó la casa de Guadalix por segunda vez.
Así, Sofía pierde el título de reina de los realities que logró al ganar Gran Hermano y Supervivientes, pues esta aventura DÚO que empezó con Alejandro Albalá ha hecho que la audiencia la eche en dos ocasiones. De hecho, se enfrentaba al propio Albalá a la expulsión y en la despedida se fundieron en un abrazo. "Yo la quiero. El querer no se te va de un día para otro” decía el exmarido de Chabelita.
Al llegar al plató, Sofía tenía la escopeta cargada y discutió con Antonio Tejado y Raquel, sus excompañeros, así como con Paz Guerra, madre de Alejandro Albalá. Tras estos choques, Sofía dijo: "Lo reconozco, soy un poco creída". Al menos, sí firmo la paz con Ylenia, pues la de Benidorm reconoció que no debía haberse metido tanto en la relación de Suescun con Albalá.
En plató, Sofía fue recibida por su hermano Christian, pues su madre Mayte Galdeano no se encontraba en condiciones para ir. “Está pasándolo muy mal, está con depresiones” señaló el joven.