Kiko Rivera ha sido el protagonista de numerosas noticias los últimos días, en especial desde que admitió en GH Dúo que había sido consumidor de drogas. Y aunque él está bien dentro de la casa donde todo se ve y se oye, la que no anda tan íntegra es su mujer, Irene Rosales.
Y es que la joven sevillana de 27 años admite que echa mucho de menos a las hijas que tiene con Kiko, y por ello se ha derrumbado, llegando incluso a pensar en abandonar el concurso. Esto, en principio, supondría una sanción económica, lo cual sería un problema para la pareja, que aceptó concursar precisamente para saldar ciertas deudas.
Para que la cosa se calmase, Kiko Rivera intentó levantar el ánimo de su mujer. “Las niñas están con sus abuelas y con la familia, que es maravillosa. No quiero que te vengas abajo de esta manera. Por favor, fuerza. Estamos aquí y vamos a disfrutar, vamos a intentar llegar lo más lejos posible, pero no te pongas así porque como entres en esto... no”, decía el joven, que curiosamente abandonó sus dos anteriores experiencias en realities, en Gran Hermano VIP por decisión propia y Supervivientes por motivos de salud.
Antonio Tejado, otro de sus compañeros también quiso invitar a Irene a que no tirase la toalla y que aguantase más. “Abandonar es una tontería”, le indicaba el sobrino de María del Monte en ese sentido.