Por la pequeña pantalla han pasado un sinfín de historias románticas que han terminado calando al público y ya forman parte de las leyendas de la televisión. Nacho y Alicia, de Médico de familia, Cata y El Duque, de Sin tetas no hay paraíso, o Lucas y Sara, de Los hombres de Paco, han calado muy hondo. Pero la historia de Carlos Alcántara y Karina es especial.
Como si fuese un gran reality en el que los espectadores han podido asomarse para ver sus vidas desde su juventud, la audiencia ha visto crecer a estos dos personajes desde que levantaran pocos palmos del suelo. Ellos son Cuéntame cómo pasó y ellos simbolizan todo lo que siempre ha querido contar esta serie de televisión.
El de este jueves es su último episodio, su particular cierre. Como si de El show de Truman se tratara, Carlos y Karina abrirán la puerta que les saca fuera de la burbuja para vivir su vida alejados de las cámaras de televisión que les han estado observando desde que fueran unos niños.
Carlos y Karina abrirán la puerta que les saca fuera de la burbuja
El resto de historias de amor de la ficción española han sido importantes, pero todas ellas contaron un intervalo de tiempo muy corto de sus vidas. Sin embargo, la audiencia ha visto crecer a Carlos, enamorarse y desenamorarse hasta terminar con el que siempre ha sido el amor de su vida. Carlitos pasó a ser Carlos delante de las cámaras y ahora toca decir adiós a alguien que ya forma parte de las familias de muchos.
Y es que si algo han conseguido los Alcántara es meterse en las casas sin hacer mucho ruido, hasta que todo el mundo se ha acostumbrado a contar con Antonio y con Mercedes en sus vidas. Nos hemos acostumbrado tanto a contar con ellos que nos negamos a pensar que algún día desaparecerán. Llevan 17 años en antena y el día se acerca, por mucho que nos cueste asumirlo.
Nos hemos acostumbrado tanto a contar con ellos que nos negamos a pensar que algún día desaparecerán
Carlos y Karina se han hecho mayores, pero también Ricardo Gómez y Elena Rivera. Ellos se han nutrido de todo lo que les ha ofrecido este proyecto televisivo como si de la casa de papá y mamá se tratara. Y ahora es cuando toca volar para ver de lo que son capaces fuera de aquellas cuatro paredes.
Ha llegado la hora de decir adiós. Lo hacen Carlos y Karina. Lo hacen Antonio y Mercedes. Y también lo hacen Ricardo y Elena como actores, que protagonizarán escenas memorables en este último episodio de la temporada para hacer ver que se están despidiendo del barrio que ha sido su casa desde que casi tienen uso de razón.
La despedida
El último episodio de la temporada estará lleno de guiños que tocarán la fibra de aquellos que se han criado con Cuéntame cómo pasó en sus pantallas. Una serie que, incluso para los que no han seguido todas las temporadas, resulta entrañable. Para algunos han sido su pasado, para otros han sido sus hermanos y los ha habido que les veía como sus primos lejanos. Pero Cuéntame es algo para todo el mundo y este episodio hay que verlo aunque no se haya visto nunca ni un episodio de la serie. Más, después de las lecciones audiovisuales que lleva dando la serie en estas últimas semanas.
Este adiós se desarrolla el 11 de septiembre de 1988. Puede ser una fecha cualquiera en el calendario de aquel año, pero es mucho más. Se cumplen exactamente 20 años desde que Cuéntame empezó a narrar cómo pasó. Pero es que el 11 de septiembre es una fecha importante para la ficción. Se estrenó un 13 de septiembre de 2001, apenas dos días después del atentado en EEUU. De hecho, TVE estuvo hasta esa misma tarde dudando si estrenar la serie debido a la conmoción que había en la sociedad. Finalmente, vieron la luz. Y ahí siguen, generando titulares 17 años después.
Bajo el título Buscando, el capítulo 348 de Cuéntame cerrará un ciclo para la serie. Carlos está destrozado porque Karina se ha ido de casa y, aunque su familia intenta animarle, no hay nada que pueda consolarle en este momento. La familia se reúne en casa de Toni para comer, pero Carlos no está de humor para celebraciones. Un episodio que inundará de lágrimas las calles de las calles de San Genaro por las difíciles decisiones que habrá que tomar.