Por primera vez en la historia, Mediaset España emitía este año el Mundial de Rusia de fútbol en su totalidad. Es decir, los espectadores podrían disfrutar gratis de un total de 64 partidos.
“La posición financiera de la compañía y su siempre presente criterio de rentabilidad hace posible que así sea. Se trata de una oportunidad extraordinaria para darle visibilidad en nuestras distintas ventanas de explotación, generando un evento multiplataforma único en el mercado de los contenidos”, destacaba su director general de Contenidos, Manuel Villanueva.
En target comercial, Rusia ha promediado cuatro puntos menos que Brasil
Con esta estrategia, según quedaba reflejado en su oferta comercial, el grupo de comunicación estimaba conseguir un 54,5% de cuota de pantalla y 9,9 millones de espectadores sumando los partidos de España, los mejores encuentros de la fase de grupos y las eliminatorias.
Una estimación que superaba con creces tanto a la del Mundial 2014, que obtuvo una media de un 38,7% y 5,4 millones, como la del Mundial 2010, que alcanzó un 48,2% de cuota de pantalla y 6,8 millones. También superaba a la audiencia media de la Eurocopa 2016 (37,4% y 5,4 millones) y la Eurocopa 2012 (41% y 5,9 millones).
Sin embargo, la pronta eliminación de España ha hecho que Mediaset se haya quedado lejos de sus expectativas. Y es que, según datos de Kantar Media, este Mundial ha promediado un 33,7% y 4,1 millones de espectadores sólo contando los partidos de Telecinco y Cuatro, un 31% y 3.839.000 espectadores con los de BeMad y Energy.
De esta forma, la estrategia de emitir más partidos en abierto ha hecho que el Mundial de Rusia haya perdido cinco puntos y 1,3 millones de espectadores respecto al de Brasil y cuatro puntos y 1,3 millones respecto a la Eurocopa de Francia de 2016.
En lo que respecta al target comercial, el más valorado por los anunciantes, el Mundial de Rusia promedia un 38,5% sólo con los partidos de Telecinco y Cuatro, casi cuatro puntos menos que el de Brasil, que anotó un 42,2% de cuota. Aún así, son datos sólo al alcance de los eventos deportivos.
La final, menos vista
Un ejemplo de que este Mundial ha generado menos interés que el de Brasil es, por ejemplo el dato de la final. Y es que mientras en 2014 el Alemania-Argentina anotó un 10.693.000 espectadores y un 64,9% de cuota, el Francia-Croacia se ha quedado con 8.247.000 espectadores y el 57,3% de share.
Donde sí ha estado cerca de sus expectativas Mediasetel ha sido respecto a la media de España. El grupo pronosticó un 70% y 13,5 millones si la Roja llegaba a la final (7 partidos) y sus cuatro partidos han anotado un 72,8% y 12,5 millones de espectadores.
Sea como fuere, Mediaset siempre ha valorado emitir el Mundial a pesar de que éste no es rentable. “Para que una competición de este tipo sea rentable hay que ver hasta donde llega España. No es igual si España llega a la final o no. Cuando cerramos el acuerdo, esperábamos que la final fuera España-Francia y que ganara España en los penalties”, explicaba el consejero delegado del grupo, Paolo Vasile, días antes de la Eurocopa 2016.
“Pero tenemos unos deberes. Y quisimos hacer de todo para no quitarle al público español la posibilidad de ver el torneo. Y también pensamos en los anunciantes, que no podíamos hacer todo lo posible para que no se les quitara una plataforma como la Eurocopa”, añadía.