Este viernes no fue un buen día para Gustavo González en Sálvame. El programa arrancaba con la policía personándose en Telecinco para entregarle una demanda interpuesta por un personaje conocido, Mariló Montero según se comentó en plató. Y más tarde, fue invitado a abandonar el programa por parte de Kiko Hernández, quien excepcionalmente estaba haciendo las funciones de presentador, tras descubrir que su compañero le habría traicionado al comerciar con su vida.
“Te han seguido, tu nueva casa, y hay un paquete de fotografías de diferentes días. Has tenido un seguimiento recientemente” explicaba en un primer momento David Valldeperas, sin dar más nombres debido a que le faltaba información. “Yo conozco la existencia de esas fotos”, comentaba entonces Gustavo, sin darse por aludido.
A Hernández, que ha sido padre por gestación subrogada, le preocupaba que en esas fotos se viese a sus hijas, y entonces dio gracias a su compañero por lo que él creía que era una protección. “Gustavo me ha avisado cada vez que había alguien de prensa fuera me ha cuidado”, confesaba Kiko, quien asume que es un personaje público y que le pueden seguir en cualquier momento.
Gustavo: "No hay traición ni deslealtad"
Más adelante, en el habitual tono folletinesco de Sálvame, se dijo que esas fotos habrían sido fruto de una traición de un compañero a Kiko, y fue entonces cuando salió el nombre de Gustavo González. “Yo llevo leyendo los titulares que hay una traición. Ni hay traición ni hay deslealtad, yo tengo la conciencia muy tranquila, te lo explicaré con más tiempo, no tengo agencia, hay un fotógrafo que me dice que hay unas fotos tuyas entrando en tu casa y yo intermedio con los directores de las revistas para vender esas fotos”, explicó a su compañero.
Kiko Hernández, con mucha calma, tomó la palabra. “Solo te voy a pedir un favor. Hoy no estamos en igualdad de condiciones, hoy estoy presentando y no quiero decir algo y que mañana digan que estoy abusando de un puesto que no me corresponde. Si me dejas este fin de semana, el lunes hablamos. Y si quieres, puedes abandonar el plató”.
Gustavo aceptó la invitación de Kiko, que zanjó el tema de manera escueta, reflexionando sobre lo sucedido las semanas anteriores. “Tanto proteger, Kiko, ten cuidado, ten cuidado… Era para proteger tu negocio”, reflexionó el ocasional presentador.