Tras una serie de negociaciones con Mediaset, esta semana se conocía la noticia sorpresa de que Alfonso Arús fichaba por AtresMedia para un nuevo programa del que aún no se conocen detalles. “Me siento feliz de volver a casa, a mi casa. Después de 24 temporadas, regreso con más arrugas pero también con más ilusión, más energía, más convencimiento, más emoción y más gratitud. Con enormes deseos de volver a ser uno más de esta gran familia que es Atresmedia”, afirmaba Arús hace unos días.
Y es que efectivamente Atresmedia fue su hogar en aquellos lejanos años 90, grupo al que llegó trambién tras una negociación frustrada con TVE. En 1990, Arús se ponía al frente en el ente público del programa Vídeos de primera, un formato en el que se emitían vídeos caseros de caídas y otras situaciones humorísticas en la que cualquiera podía participar enviando una cinta de VHS con lo más cómico que hubiese recogido su cámara doméstica.
Tras un par de años de éxito en la noche del martes, Arús negoció un cambio de rumbo con TVE, tal como llegó a contar él en alguna entrevista, para presentar un nuevo espacio de humor que bebía del Força Barça que realizaba en el circuito catalán de TVE2, y que finalmente recibió el nombre de Al ataque. Sin embargo, las negociaciones no llegaron a buen puerto, y por ello acabó con el proyecto en Antena 3.
Un proyecto que inicialmente era para TVE
En otoño de 1992, y de nuevo en martes pero ahora en Antena 3 veía la luz Al ataque, en el que se rodeó de colaboradores como Jorge Salvador, Buenafuente, Xavi Mas, Javier Martín y con Goya Toledo y Nausika como azafatas.
En programa sirvió como precuela de éxitos futuros de la televisión como Homo Zapping, pues ya se parodiaban programas de la competencia como aquel “¿Quién sabe ande?” o “La maquinilla de la verdad”, y en la que se realizaban sketches con parodias de famosos como El Cordobés, Andrés Caparrós o Papuchi junto a personajes propios como Pepe Gáfez (inspirado en el cantante José Vélez y que solía decir "qué mala suerte, chato"), el guitarrista Palomino o la malhumorada niña Vanessa, que popularizó el chascarrillo “que no te enteras, contreras”. La lista de personajes imitados sería muy extensa, pero no se puede olvidar a Ruiz Mateos, Alfredo Di Estéfano, Nuñez y Cruyff, José María Carrascal y tantos otros.
Al Ataque iba precedido de alguna película en sus inicios, y más tarde por aquel Queremos saber de Mercedes Milá, y ambos llegaron a ser los espacios más vistos de Antena 3 en alguna que otra ocasión.
En Al Ataque hubo secciones muy populares como “El Latiguillo”, consistente en ver cuántas veces repetía una frase un famoso durante unas declaraciones, "El fútbol es así" centrada en el deporte o la de "Arús con leche", en la que los colaboradores comentaban imágenes de actualidad, como aquellas en la que Isabel Pantoja chocaba con otro coche al aparcar y por ello una de sus ayudantes salía con el bolso en la mano para tapar la cámara del reportero. Incluso hubo una especie de secuela de Vídeos de primera en la que los espectadores mandaban vídeos domésticos con sus mejores imitaciones de famosos.
Carlos Jesús predijo la muerte de Arús y Cárdenas
También descubrimos allí a Javier Cárdenas (quien curiosamente más tarde presentó Videos de primera) y que entonces ejercía de reportero entrevistando a personajes peculiares como el curandero Carlos Jesús, quien se desdoblaba en un tal Micael. Fue Carlos Jesús quien nos descubrió la existencia de un planeta llamado Raticulín del que vendrían “13 millones de naves, de una confederación intergaláctica”.
Un personaje que caló mucho, sobre todo, por las imitaciones que hacía el propio Arús al que se bautizó como “el otro Micael”, que sanaba mientras decía “chu-chu”, acompañado de un movimiento de manos. Una parodia que no sentó bien al vidente, que llegó a profetizar que Cárdenas y Arús morirían de manera violenta.
Y tampoco podemos olvidar personas anónimas que adquirieron una gran popularidad, como aquel joven al que en mitad de una entrevista una tal Sole le tiraba un huevo, y él de manera espontánea le amenazaba con “meterle con el mechero” a “la mierda la Sole”.
Al Ataque fue un éxito y contaba con numerosos patrocinios según la sección (cervezas, conservas, barras energéticas...) y llegó a tener incluso su propia revista en la que se conocían nuevas aventuras de Vanessa, Gáfez y compañía a través de cómics, y una colección coleccionable de cromos con una marca conocida de bollería. Pero pese a ello, en junio de 1993 decidió poner punto y final a aquella aventura, porque tal como explicó en una entrevista, “se sentía incomprendido”. Pese a todo, en 1994 volvería a la misma cadena, la que ahora vuelve a ser su casa, con un programa muy similar y que entonces fue bautizado como El chou.
Y ojo, que no se confundan estos dos nombres de programas de Arús con Al ataque chow, que fue el programa de Telecinco que surgió como competencia al éxito que tenía El club del chiste en Antena 3, allá por 2010.