El dúo (antes trío) Martes y Trece que formaron Josema Yuste y Millán Salcedo se convirtió en un emblema de la nochevieja de todos los españoles durante los años 80 y 90. Ayer tarde, Josema visitó el programa Viva la vida para hablar de T'axi', la obra de teatro que dirige y protagoniza junto a otros televisivos como El Monaguillo, y Toñi Moreno no pudo evitar recordar con él alguno de sus más míticos sketches.
La presentadora le preguntó que si le gustan las empanadillas y si suele ir a Móstoles, algo que Josema contestó de manera afirmartiva, e incluso comentó que en Móstoles le han pintado recientemente el coche y muy bien. Además, el actor contó que uno de sus números más recordados, el cura de “ella no quería” estaba inspirado en un sacerdote real que conocía.
Josema evitó el tema en 'Viva la vida'
En otro momento, Toñi le puso imágenes de aquel especial llamado El 92 cava con todo en el que el hilo conductor era unas vacaciones en Mallorca de Isabel Pantoja y Encarna Sánchez, y la Moreno le preguntó que cómo se tomó aquello la locutora de la Cope, y que si llegó a presionarles para que no grabasen aquel especial.
“Qué guapísima estás hoy, por cierto” dijo Yuste, saliendo por la tangente, intentando no reabrir viejas heridas, y afirmó que mientras María José Cantudo, por ejemplo, se tomó muy bien sus imitaciones, Encarna no lo hizo tanto. “¿Tengo yo mejor carácter que Encarna?” preguntó la Moreno. “Muchísimo mejor”, respondió Josema Yuste.
Las presiones que sí sucedieron
No hay que bucear mucho en hemerotecas para conocer de la voz de sus protagonistas que aquella Nochevieja que daba paso a 1992. En su libro ‘En mis trece’, Millán Salcedo recoge con todo lujo de detalles cómo Encarna Sánchez quiso impedir a toda costa que su estrella amistad con la Pantoja fuese motivo de sorna en Televisión Española.
"Ese programa no va a emitirse"
Durante la grabación del especial, Encarna se dedicó a llamar al hotel donde se desarrollaba la acción, y dejó numerosos mensajes al dúo. Millán, finalmente, le devolvió la llamada, y Encarna respondió airada. “Estoy con Rosa Conde y ese programa no va a emitirse”, dijo la periodista. Salcedo preguntó la razón, y según sus palabras, Encarna “perjuró al más puro estilo camionero y me lio la de San Quintín”. Así le ordenó “a voz en grito que suspendiéramos la grabación de inmediato”.
Millán no entendía el escándalo, pues para él la imitación era similar a la del número de las empanadillas de Móstoles, de la Nochevieja de 1985, y consideraba que tampoco era para tanto que Encarna (interpretada por él mismo) pidiese un copazo de coñac, o que un botones (un joven Dani Martín, futuro cantante de El canto del loco) le dijese “sí, señor” fuesen una ofensa. Intentó explicárselo a la locutora, y como la Sánchez no atendía a razones, él llegó a espetarle que no podía decirle cómo hacer su trabajo del mismo modo que Martes y Trece no se lo decía a ella, y que si lo consideraba oportuno le pusiesen una querella.
"Atente a las consecuencias" amenazó Encarna
“Ese programa no va a salir en antena”, sentenció Encarna, a lo que el humorista le respondió que sí saldría dado que estaba firmado. Y entonces ella le anunció: “atente a las consecuencias”. Cuando Millán le explicó a su compañero lo sucedido, Yuste le dijo que eso le sucedía por devolver la llamada. Por su parte, Isabel Pantoja también habló con Millán, y le pidió llorando que no lo emitiesen. Dado que Millán tampoco cejó en su empeño, la tonadillera le dijo que aquello supondría el fin de su amistad, que se había gestado durante años.
La vendetta de Encarna llegó a través de las ondas. En su programa ‘Directamente Encarna’ cargó duramente contra Martes y Trece. “De estos personajes cuando llegue el momento yo me voy a encargar. Y algún día, cuando abra la boca, de un trabajo de investigación que estamos haciendo y que es de lo más importantes, se van a tener que ir de este país, sobre todo uno, Millán, de Martes y Trece”. Así los tildó de vulgares, sin gracia, y a Millán lo llamó feo, de tener cara de mala gente y lo acusó de “ir con gente muy mayor, y no quiero hablar más, porque en su momento se contará toda la historia”. Un ataque que en sus memorias Millán se preguntó que por qué fue solo dirigido hacia él, si Martes y Trece eran dos.