Con el verano nada mejor que darse un baño en una piscina. Y si no se tiene una a mano, siempre se puede sintonizar la televisión para ver algún concurso en el que, por el motivo que sea, el concursante acabe en el agua: porque las pruebas lo exijan, porque se ha tropezado y paga su castigo mojándose, o sencillamente porque lo que se puntúa es lo bien que cae al agua.
Repasamos algunos de los programas más míticos de la televisión en el que las piscinas han tenido un peso importante.
Uno para todas
Formato italiano que llegó a Telecinco a mediado de los 90. Goyo González presentaba a una serie de concursantes masculinos que luchaban por ser el más guapo y más gracioso de todos con pruebas como bailar, hacer posturas de culturista o sencillamente demostrar cuál era su mayor talento.
Un numeroso grupo de mujeres en plató votaban por su favorito, y el que no fuese elegido acababa en la piscina de un empujón que le propinaban las Chicas Glu-Glu, las bailarinas del programa. Hubo una edición con famosos, y el Conde Lecquio, Rafi Camino o
El gran juego de la Oca
El concurso creado por Jocelyn Hattab tuvo tres etapas en televisión: dos en Antena 3 (con Emilio Aragón, Lydia Bosch y Patricia Pérez la primera, y con Pepe Navarro, Ivonne Reyes y Eugenia Santana la segunda) y otra en Telecinco (Andrés Caparrós Jr, Paloma Marín y Elsa Anka).
En todas las temporadas, el formato consistía en enfrentar a cuatro concursantes a diferentes pruebas físicas en las que se apostaban el dinero que ellos considerasen. Muchas de esas pruebas se realizaban en una piscina que había en el centro del plató, y en la que lo mismo había que desactivar minas flotantes que cruzar un laberinto o cortar grilletes a nadadores presos bajo el agua.
Splash y Mira quién salta
Antena 3 y Telecinco sacaron casi a la vez un programa con famosos que tenían que saltar desde lo alto de un gran trampolín: Splash en ATresMedia y Mira quién salta en Mediaset. Por ellos pasaron Juan José Ballesta, Toñi Salazar, Miriam Díaz-Aroca, Álvaro Muñoz-Escassi, Sonia Blanco, Lydia Lozano y otros tantos famosos. De todos, destacaron Falete y Sandro Rey por sus peculiares bañadores, que generaron numerosos comentarios en las redes sociales.
A Mira quien salta le salió mejor la jugada, pues tuvo dos temporadas, mientras que el trampolín de Antena 3 solo tuvo una tanda de programas.
Juegos sin fronteras
Programa de finales de los ochenta y principio de los noventa que podría ser calificado como una Eurovisión del Grand Prix. La UER producía este concurso internacional en la que varios países competían en equipos de diez participantes en diferentes pruebas físicas y deportivas, en algunas de las cuales si te despistabas acababas en el agua. Elisa Matilla, Isabel Gemio, Guillermo Summers o Daniel Vindel fueron algunos de los presentadores de este formato según la temporada. Se emitió por última vez con la participación de España en 1992.
Bellezas al agua
Formato de de origen italiano (Bellezze al bagno), que podría considerarse el primo de Juegos sin fronteras, pues también competían varios países entre sí. Se emitió en Telecinco en 1990, 1992 y 1993, con presentadores como Norma Duval, Andoni Ferreño o Loreto Valverde, según la época. Una de sus pruebas más conocidas fue en la que una pareja debía besarse bajo el agua el mayor tiempo posible. Tuvo una secuela invernal, Bellezas en la nieve.
La Merienda
Los pequeños de la casa también se daban sus buenos chapuzones en televisión. En Antena 3 se emitió en los veranos de los 90 el programa La Merienda, que por vacaciones se trasladaba desde un plató hasta un parque acuático, en la que dos equipos de niños (los indis rojos y los indis azules) se enfrentaban a diferentes pruebas por toboganes con agua o en piscinas. El objetivo era eliminar al rival y después encontrar el mayor número de llaves, que cada una abría (o no) un candado con un premio. Ana Chavarri fue la presentadora más recordada de este concurso.
Guaypaut
En verano de 2009 Telecinco estrenó, tras un especial por Navidad, una especie de Humor Amarillo llamado Guaypaut (basado en el formato Wipe out) en la que los concursantes debían realizar diferentes pruebas físicas, y en el caso de que no las hiciesen bien acababan en una charca de barro o en un lago, dependiendo de dónde fallasen.
Ninja Warrior
Ha sido uno de las últimas apuestas de Antena 3 para su prime time, presentado por Pilar Rubio, Arturo Valls y Manolo Lama. Los aspirantes al título de Ninja Warrior competían por ser el que hiciese una gymkana en el menor tiempo posible. Si fallaban, lo más posible es que acabasen cayendo a alguna de las numerosas piscinas que tenían; además, si se mojaban la ropa en alguna de las pruebas, también eran descalificados. Sergio Verdasco ganó la primera edición.