A pesar de que algunos hayan intentando culpar a Manel Navarro y su gallo del desastre del pasado sábado en el Festival de Eurovisión -algo falso ya que los jurados votaron en el ensayo del viernes y fueron los que le dieron 0 puntos-, los responsables de los constantes fracasos en el certamen no se subieron al escenario de Kiev.
Aquellos que están permitiendo este continuo maltrato de la Marca España en un escaparate como Eurovisión, visto cada año por más de 200 millones de espectadores, son los dirigentes de RTVE encargados de esta marca.
Eurovisión es un programa visto cada año por más de 200 millones de espectadores
El primero de ellos es el director de TVE, Eladio Jareño. Como ya publicamos el pasado sábado, la elección de Manel Navarro como representante no es sino una pieza más del acercamiento que está intentando llevar a cabo el directivo a Catalunya para estrechar relaciones con aquella comunidad.
Y es que Navarro no es sólo catalán de nacimiento, sino que no tiene inconveniente en confesar que se siente orgulloso de ser español. “¿Por qué un catalán no va a poder representar a España en el festival? Yo no hablo de política, sólo tengo cabeza para la música. Pero estoy muy orgulloso de ser español. Y si voy a Kiev, estaré muy contento de defender a nuestro país”, decía hace unos meses en una entrevista a ABC.
No hay que olvidar que, antes de ser elegido como director de RTVE, Jareño fue jefe de prensa de la expresidenta del PP en Catalunya, Alicia Sánchez Camacho. Un cargo que le ayudó para después ser designado responsable de RTVE en Catalunya, donde ya reclamó un papel de mayor importancia para el centro territorial del Sant Cugat del Vallés.
La imagen de Eurovisión
El siguiente responsable en cuanto a Eurovisión es María José Bultó, directora de estrategia e imagen de RTVE y por tanto máxima responsable del Festival en cuestión de marca. Nombrada en noviembre de 2013 como directora de RRHH de RTVE a petición de Enrique Alejo, director general corporativo y hombre de Cristóbal Montoro en la Corporación; Bultó accedió a su nuevo cargo en abril de 2015.
Desde entonces la directiva se ha ocupado de impulsar nuevos proyectos y nuevos formatos en la cadena, decidir cómo será la televisión pública del futuro y cómo tiene que evolucionar TVE en el nuevo contexto del sector. Está claro que en Eurovisión la cadena no ha evolucionado en ningún sentido.
En el siguiente escalón se encuentra Toñi Prieto, la directora de entretenimiento de RTVE que ya tuvo que personarse frente al Comité de Auditoría de Radiotelevisión Española para dar explicaciones sobre todas las acusaciones vertidas sobre el turbio proceso de preselección que eligió a Navarro como representante español en Eurovisión 2017.
Hasta ahora, además, también se había culpado al jefe de delegación, Federico Llano. Sin embargo, este año abandonaba su cargo después de la polémica gala de Objetivo Eurovisión y dejaba sus funciones a Ana María Bordas y Antonio Losada, que ya se encontraron con una candidatura seleccionada.
A partir del próximo año se podrá analizar el papel de Bordas y Losada en Eurovisión. De momento, el pasado sábado la directiva echó balones fuera al ser preguntada por el descalabro de Manel.
“TVE es una empresa muy seria. Mucho más seria de lo que vosotros podáis entender. Es una empresa muy sólida, una empresa que tiene muchos años. Es una empresa pública y hay grandes profesionales. Nosotros no hacemos tonterías ni ponemos en riesgo nuestra solidez. Eso es lo que hay", dijo.