Ha tenido que pasar un mes y medio para que se produzca uno de los besos más esperados de GH 17. La relación entre Bea y Rodrigo ha sido un quebradero de cabeza para muchos, pero ha terminado con final feliz. Al menos, de momento.
Si en un principio Rodrigo se fijó en Adara, esta relación no terminó de cuajar. Eso acercó mucho a Bea y a Rodrigo, que si bien al principio sólo eran amigos, ella nunca ha ocultado que su compañero de concurso le gustaba. Él, sin embargo, siempre ha preferido mantener las distancias.
El público siempre ha deseado que pase algo más entre los dos, de ahí que fuesen de los primeros elegidos para pasar unos días en el apartamento, alejados del resto de sus compañeros. Esto les sirvió para acercarse un poco más, pero tampoco hubo beso.
Este domingo, al final, entre cariños y arrumacos, los dos han caído en la tentación y han cedido ante la mirada de las cámaras. No se han ocultado en ningún momento con sábanas y lo han hecho delante de la audiencia, como un pequeño regalo. Al final, ha habido beso.