La necesaria despolitización de 13TV para abrirse a nuevos públicos
Hace apenas unos meses, un informe encargado por los obispos calificaba a 13 TV como una cadena “culturalmente pobre”, afín al PP y para “la tercera edad”. "La televisión de la iglesia española no va por buen camino ni en el objetivo de la presencia de la Iglesia en la sociedad ni en el diálogo con la cultura ni en la comunicación del Evangelio".
Por todo ello, la Conferencia Episcopal reclamaba un “cambio de guión” que poco a poco está llegando a la emisora. El primer síntoma se producía hace sólo unas semanas cuando la cadena decidía cancelar la tertulia política de Isabel Durán, Más claro agua.
En su lugar, como ya avanzara este portal en exclusiva, la encargada de renovar las mañanas del canal será Nieves Herrero, que se pondrá al frente de Hoy es noticia con Nieves Herrero, en el que la periodista se rodeará de colaboradores para abordar los temas de actualidad que se acercarán a temas sociales y más humanos.
Dentro de esta estrategia también se incluye un nuevo espacio presentado por Patricia Betancort en la franja del access prime time. Este nuevo espacio, que será estrenado el 12 de septiembre, se centrará principalmente en la crónica social y de sucesos y será emitido de manera semanal de lunes a jueves.
Estos cambios, sin embargo, no afectarán al programa estrella de la cadena, El Cascabel, que seguirá emitiéndose esta temporada. No obstante, la idea de la cadena es que cambie el tono y se abra a la pluralidad.
Cinco años de pérdidas
La estrategia no deja de ser arriesgada ya que 13 TV ha conseguido sus mejores datos de audiencia gracias a sus programas políticos. Sin embargo, si la cadena quiere abrirse a un nuevo público, es necesario que aligere la carga política de su parrilla.
No hay que olvidar, además, que hace tan sólo unos meses, la emisora firmó un acuerdo con Publiespaña, la publicitaria de Mediaset España, para que se encargue de gestionar su publicidad.
En el horizonte, mejorar su facturación después de acumular cinco años consecutivos en números rojos. El pasado año, sin ir más lejos, la cadena terminó el ejercicio con un agujero de 12,9 millones de euros de pérdidas.