Durante su entrevista este lunes en Espejo Público, la expresidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, acusó a Atresmedia de dar publicidad a Podemos. "No he visto propaganda como la que acabáis de hacer de este partido", dijo.
Un ataque sorprendente teniendo en cuenta que Aguirre convirtió a Telemadrid en una televisión a su servicio. Una política que llevó a la cadena de ser referencia para los madrileños a convertirse en una cadena residual.
"Aguirre llegó a la presidencia de la Comunidad de Madrid en 2003 con el objetivo de privatizar la cadena autonómica. Con el único fin de darse autobombo, despilfarrando el dinero en beneficio de sus amiguetes, Aguirre montó su chiringuito en Telemadrid", recuerda , recuerda la plataforma Salvemos Telemadrid.
"Con su gestión, infinidad de moscones llegaron a Telemadrid al olor del dinero público contribuyendo al desfalco y la perdida de credibilidad de la cadena", comentan.
Y recuerdan. "En 2003 había 23 directivos, mientras que en 2011 se hinchó hasta el doble. (...) El sueldo del director general, del subdirector, del director de informativos o de antena cobran más que el presidente del Gobierno o la propia Esperanza Aguirre".
"¿Por qué siguen cobrando esos sueldos si desde 2003 han conseguido que la audiencia se desplome de un 17% a un 6%, los ingresos por publicidad hayan pasado de 64 millones de euros a 23 millones y la deuda se ha triplicado?", se preguntan al final.
Según el último informe de Barlovento Comunicación referente a diciembre de 2014, Telemadrid promedia una media de audiencia de un 4,1%. Es la cadena autonómica con peores datos de la FORTA.